El CEIP Domingo Velázquez de El Matorral realizó este miércoles distintas actividades, incluyendo la lectura de un manifiesto, para conmemorar el Día Universal de la Infancia y la Adolescencia.

El alcalde de Puerto del Rosario, Juan Jiménez y la concejala de Servicios Sociales,Yanira Domínguez, asistieron a este acto, junto a profesores y alumnos y las familias de los niños participantes.

El 20 de noviembre de 1989 la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Convención de los Derechos de la Infancia, por ello, el 20 de noviembre de cada año se celebra en todo el mundo El día Universal de la Infancia. 

Con motivo de esta celebración en el  espacio del proyecto CAI, se decidió  elaborar  un manifiesto para conmemorar dicho día, con la participación de todos los niños y adolescentes integrantes del foro de la Infancia y de la Adolescencia de Puerto del Rosario

Texto del manifiesto:

“Como sabrán el 20 de Noviembre, es el Día Internacional de los Derechos y Deberes de la Infancia, que se celebra en todo el mundo ya que la Asamblea General de Naciones Unidas aprobó en 1989 un tratado internacional que reconoce los derechos humanos básicos de los niños y niñas.

Unicef Comité Español, el pasado año, ha renovado por segunda vez el sello de reconocimiento al municipio de Puerto del Rosario, denominado CAI (Ciudad Amiga de la Infancia) por cuatro años más por su compromiso a respetar y aplicar políticas, normas y derechos de la infancia contenidos en la Convención de los Derechos del Niño. Por mejorar las condiciones de vida de los niños, niñas y adolescentes así como por tenernos en cuenta en el diseño de proyectos dirigidos a nosotros y nosotras.

Con motivo del 30 aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño, el pasado mes de octubre se reunieron alcaldes de todo el mundo en la primera Cumbre Internacional de Ciudades Amigas de la Infancia organizada por UNICEF y la ciudad de Colonia, en Alemania. La cumbre finalizó con una declaración de alcaldes y alcaldesas donde se asume el compromiso con la Convención sobre los derechos del Niño y sus 54 artículos que reconocen a las personas menores de 18 años como sujetos de derecho, sin discriminación alguna, velando por su interés superior y con pleno derecho a expresar sus opiniones.

Los y las niños y niñas no entendemos de política, nos mueven los gestos de buenas voluntades, de igualdad y comprensión. Son ustedes, los adultos los que nos deben enseñar y educar en estos valores tan necesarios e importantes para vivir en sociedad. Creemos de vital importancia seguir trabajando en el logro de la igualdad en el sentido más amplio, dejemos atrás las creencias limitantes de que nos clasificamos por colores (azul o rosa), de que hay deportes para niños y para niñas, de que algunos oficios son cosa de mujeres y que otros son de hombres; pero en esta lucha se requiere la participación de todos y todas.

Es nuestro deber y responsabilidad luchar por las desigualdades, por los y las que no tienen voz o no se permiten darla, somos y debemos ser la representación de aquellas personas que están olvidadas, marginadas y vapuleadas. Celebramos el Día Internacional de la Infancia y la Adolescencia, para conmemorar, recordar y exigir que se cumplan nuestros derechos, sin olvidar que también debemos hacer valer nuestros deberes para poder vivir en un mundo mejor e igualitario.

Por eso debemos recordar este día, unirnos y alzar nuestras voces por quienes no pueden hacerlo. exigimos que por encima de las mujeres y los hombres estén las personas, que entre todos y todas fomentemos el respeto, la empatía y la conciencia de una sociedad justa e igualitaria. Promovemos que: la violencia nunca sea una característica de la condición humana ya que los humanos, sólo debemos fomentar la paz independientemente del género al que permanezcamos.  

Me gustaría finalizar expresando nuestra intención de seguir luchando por la libertad de aquellos y aquellas que no la tienen. Seguiremos alzando nuestra voz para que se nos escuche a favor de nuestros Derechos. Seguiremos apoyando la libertad y seguiremos manifestando nuestra repulsa por todas las injusticias que día a día ocurren en nuestro mundo. - Yo no quiero ser adulto para que me traten con respeto. - Yo no quiero ser adulto para que me manden a callar a tu antojo. - Yo no quiero ser adulto para hablar más que ser escuchado. - Yo quiero ser niño o niña para que me respeten como un adulto.

Les animamos a que siempre quede en sus memorias esta frase: No somos ni seremos el futuro, la infancia y la adolescencia es el presente”.