Los pacientes de las especialidades de reumatología y neumología del Hospital General Virgen de la Pena de Fuerteventura demandan desde hace tiempo que se saquen las plazas para contar con especialistas en la Isla y evitar los trasladados al Hospital Insular de Gran Canaria.

Montserrat Martín es paciente de reumatología desde hace 20 años y ha sufrido un calvario al pasar por diferentes médicos. También ha sido derivada al Insular de Gran Canaria y ha tenido que afrontar constantes traslados ante la falta de especialistas en el Hospital General Virgen de la Pena.

“He llegado a anular citas en Gran Canaria porque me encontraba fatal y no estaba bien para coger un avión, la guagua, y todo lo que supone ir a la consulta”, explica. “Llegué a preferir que me asignaran un médico general para evitar este sufrimiento”, desvela.

Montserrat asegura que ha llegado a conformarse con una rutina en la que revisan su estado general, la medicación y la emplazan para la siguiente cita. Para esta paciente, resulta “incomprensible” que el Hospital General de Fuerteventura no oferte las plazas de profesionales que necesita el centro, ya que se pueden producir errores en diagnósticos y tratamientos, “y para eso está el especialista”, señala.

Muchos pacientes exigen respuestas ante tanta “desidia” y que de una vez se pongan los servicios sanitarios y los facultativos “que merece la población majorera”.

“Hace muchos años que se demandaba un reumatólogo y ahora se necesitan más porque el número de usuarios y enfermos aumenta año tras año”, explica Martín. Su caso es un ejemplo de lucha y constancia personal, con una gran voluntad y terapias para recuperar movilidad y flexibilidad, y evitar el deterioro del aparato locomotor (huesos, articulaciones, músculos, ligamentos y tendones) y del tejido conectivo.

Las críticas por las carencias no llegan solo de pacientes. La Sociedad Canaria de Reumatología (SOCARE) ha formulado una denuncia pública al considerar que en Fuerteventura se evidencia una falta de equidad en el acceso a los servicios públicos.

La Sociedad Española de Reumatología (SER) ha establecido que el número máximo de habitantes por reumatólogo debe situarse entre 40.000 y 50.000, y por lo tanto en el Hospital General debería haber al menos dos reumatólogos, ya que la población supera los 113.000 habitantes en la Isla, explica el presidente de la SOCARE, Antonio Naranjo.

Una demanda que respaldan los colectivos que participan en la Mesa del Paciente del Gobierno de Canarias, que reclamarán servicios y especialistas para que mejore la sanidad en Fuerteventura.

Naranjo apunta que la reumatología es la especialidad de referencia en aparato locomotor incluyendo las enfermedades sistémicas del tejido conectivo y la osteoporosis. Los reumatólogos actuales siguen un itinerario formativo MIR de 4 anos, existiendo tres servicios docentes en las Islas Canarias.

Una carencia incomprensible

“En una reunión el año pasado con el consejero de Sanidad, José Manuel Baltar, le transmitimos que resultaba incomprensible esta carencia en Fuerteventura cuando Lanzarote tiene tres especialistas, hay dos en la Palma y uno va a La Gomera a pasar consulta, mientras en Fuerteventura se siguen derivando los pacientes al Insular” en Gran Canaria, recalca Naranjo.

“Si sacan las plazas se cubrirán con especialistas interesados en ir a trabajar a Fuerteventura porque cada año se titulan nuevos profesionales”, advierten desde la Sociedad Canaria de Reumatología. Una entidad que lucha por unos estándares de calidad en los servicios sanitarios de las Islas.

El problema se debe a que en 2014 se ofertó una plaza de esta especialidad en el hospital majorero pero no se cubrió por falta de profesionales interesados, una situación que cambia cada año, pero el Hospital General cuenta con cinco profesionales de medicina interna general y la Gerencia “considera que es suficiente y no mueve ficha”. Los especialistas recuerdan que se producen errores en diagnósticos.

Neumología

En octubre de 2015, la Consejería de Sanidad del Gobierno canario buscaba reumatólogos y neumólogos dispuestos a cubrir estos puestos en el Hospital de Fuerteventura y evitar desplazamientos de pacientes a otras Islas, siendo consejero Jesús Morera.

Durante su visita al hospital majorero, el consejero destaco entonces la problemática existente a la hora de buscar especialistas para los centros sanitarios de las Islas no capitalinas, porque “los profesionales vienen, están temporadas y se marchan”, de modo que hay que “conseguir médicos que se arraiguen, y estén una larga temporada”.

Cuatro años más tarde se da la circunstancia de que hay especialistas majoreros que trabajan en otras Islas ante la falta de plazas ofertadas por la Consejería de Sanidad, aunque Fuerteventura cumpla con todos los requisitos para tener estas consultas en el Hospital General.