La sección quinta de la Audiencia Provincial de Las Palmas ha dado la razón a la Comunidad Aljibe Los Curbelos y considera que son los legítimos propietarios de una parcela en Lajares que Gavias Nuevas Sol, una sociedad de Roque Martín Mesa, conocido como ‘Roquito’, había vendido a su vez a un tercero.

El comprador de esa parcela, segregada de una finca matriz de más de cien hectáreas, Eduardo Méndez Porras, había ejercicio la acción declarativa de dominio contra dicha comunidad. Perdió en el Juzgado en primera instancia y ha vuelto a perder ante la Audiencia ya que este tribunal considera que el título de propiedad que intenta esgrimir no es válido.

La Audiencia Provincial señala que, por el contrario, es la Comunidad Aljibe Los Curbelos quien tiene inscrito a su nombre en el Registro de la Propiedad el dominio sobre la finca.

‘Roquito’ fue detenido en el año 2017 en el marco de la operación Atino, junto a otras 16 personas, entre las que se encontraban tres notarios y un trabajador del Catastro, por constituir una trama dedicada a usurpar terrenos y venderlos posteriormente.

Muchos de esos terrenos se encuentran en Lajares, donde está también esta finca, que era un terreno comunal destinado a recoger el agua de lluvia hasta los aljibes. Uno de los socios de la Comunidad Aljibe Los Curbelos señalaba en julio del año pasado a Diario de Fuerteventura que Martín Mesa se intentó quedar con el terreno.

“Este suelo se lo intentó quedar pero teníamos muchos papeles y el catastro desde 1957, lo partió en parcelas, vendió algunas y hasta hay licencias, pero lo paramos”, señalaba.

En el fallo, la Audiencia señala que el contrato de compraventa es “sumamente sospechoso por el precio de adquisición de la finca”, que sólo ascendió a 2.499 euros. La escritura que esgrimía el comprador deriva de una ampliación de capital de la sociedad Gavias Nuevas Sol, de 'Roquito', del año 1995.

El comprador alegó en su favor que llegó a hacer movimientos de tierras con fines agrícolas y a construir un cuarto de aperos autorizado por el Ayuntamiento de La Oliva. También argumentó que los socios de la Comunidad Aljibe Los Curbelos, “doce matrimonios”, sólo tenían derechos sobre el aljibe y que ni siquiera se ha comprobado que exista un aljibe en la nca.

La sentencia señala que esa comunidad aparece como propietaria de la finca matriz en el catastro rústico del municipio desde al año 1957 y que además hay testimonios de vecinos y propietarios que así lo confirman.

‘Roquito’ en un programa de televisión de Cuatro.

El Tribunal da la razón a la Comunidad Aljibe Los Curbelos frente al comprador de una de las parcelas de esa finca, que adquirió por sólo 2.499 euros

Por contra, señala la sentencia que no sirve la escritura de compraventa porque necesita justificar la procedencia del dominio de quien le vendió la parcela, y no sólo la certificación catastral, y añade que el comprador que ahora reclama la propiedad de la finca no ha presentado ninguna prueba que acredite que quien le vendió ese terreno era su propietario.

“Fácil le hubiera sido”, señala la Audiencia, justificar dicho extremo acudiendo a su transmitente. Más ni una prueba se ha aportado al efecto”, señala el fallo. De hecho, en la escritura de venta se puede leer que “el adquirente prescinde expresamente de la información registral por su conocimiento de la situación jurídica del inmueble, declarándose satisfecha por la información resultante del título, por las afirmaciones de la parte transmitente y por lo pactado entre ambas partes”. El Tribunal señala que, por tanto, el comprador confió en las a afirmaciones que hacía el vendedor.