La Guardia Civil de Fuerteventura detuvo, el 9 de diciembre, a una mujer de 27 años de edad por un delito de lesiones graves, tras apuñalar varias veces a la víctima en el interior de un vehículo, ocasionándole “puntos de sutura en una herida incisa en la oreja, en el cuello y en el rostro”, además de proferirle amenazas e insultos empleando para ello una aplicación de mensajería, todo ello ocurrido en la localidad de Pájara.

A raíz de una llamada del Centro Coordinación de Emergencias y Seguridad (CECOES) la Guardia Civil es informada y alertada de que una mujer había sido brutal y reiteradamente apuñalada, causándole un corte con una profundidad de cinco centímetros, en el interior de un vehículo, y siendo abandonada a su suerte en unos aparcamientos.

Dicha información desencadenó una rápida respuesta por parte de la Guardia Civil del Puesto Principal de Morro Jable, quienes acudieron al lugar de los hechos, momento en el cual la víctima estaba siendo trasladada al Hospital General de Fuerteventura Virgen de la Peña, debido a que sus heridas evidenciaban la gravedad del ataque, pues esta presentaba laceraciones en la oreja, el cuello y el rostro.

Una vez asistida y asegurada la integridad física de la víctima, los agentes proceden a recabar toda la información posible. Testimonios de la víctima y testigos se entrelazaron con descripciones detalladas de la presunta agresora y del vehículo utilizado en la huida.

Fruto de los datos obtenidos, se procede por parte de los agentes implicados a poner en marcha un dispositivo de búsqueda de la autora. Dando inicio a un cerco policial por todas las unidades de la Guardia Civil presentes en la Isla de Fuerteventura, implicando para ello a todas las localidades colindantes al lugar donde ocurrieron los hechos. Coordinándose además un despliegue junto a Policía Local y servicios de emergencia.

Tras una intensa labor de investigación, la Guardia Civil logró localizar a la autora, procediendo acto seguido a su detención. La celeridad de la operación no solo permitió la aprehensión de la sospechosa, sino también la recuperación del arma utilizada en la agresión, una pieza clave para la futura investigación judicial.

Las primeras hipótesis manejadas por la Guardia Civil sugieren que este violento episodio podría tener sus raíces en una disputa preexistente entre la víctima y la agresora. Al parecer, según información aportada, se trataba de un encuentro destinado a resolver diferencias, el cual degeneró en una confrontación física, cuyas motivaciones exactas aún son desconocidas. Este caso pone de manifiesto la delicada naturaleza de los conflictos interpersonales y la importancia de la labor policial en la preservación de la seguridad ciudadana.

La detenida junto con las diligencias instruidas al efecto quedó a disposición del Juzgado en funciones de Guardia de Puerto del Rosario.