El Ayuntamiento de La Oliva ha renovado la antigua canalización del espigón del Muelle Chico de Corralejo y ha localizado en esta última semana un nuevo pozo negro sin conectar a la red de saneamiento en la zona, fruto de la investigación que llevan a cabo la institución y la empresa de alcantarillado con el objetivo de solucionar una situación que afecta al casco histórico de la localidad desde hace años.

Se trata del tercer pozo negro que se localiza y que será clausurado en este último año de investigación, en la línea de seguir descartando posibles focos de infiltraciones que permitan mejorar los análisis de calidad del agua y proceder eventualmente a la reapertura de la playa.

El concejal de Playas, Genaro Saavedra, indicó que se ha sustituido la antigua canalización de fibrocemento del espigón e instalado una nueva tubería. Aunque no se han detectado signos evidentes de fugas, valoró que "igualmente siempre es positivo renovar las canalizaciones para evitar males futuros". También adelantó que "el siguiente trabajo será clausurar el pozo negro que acaba de detectarse en el entorno del Muelle Chico".

Oliver González, concejal de Obras y Servicios, recordó una vez más las dificultades de solucionar "un problema que lleva ahí durante décadas, y que es muy complicado resolver porque hay que buscar bajo tierra, sin saber exactamente donde está el foco o los focos contaminantes".

También explicó cómo, además de las antiguas edificaciones, se están inspeccionando también las más modernas. "Hay edificios que han reemplazado a las antiguas casas del Casco Viejo, pero también podrían tener fugas si no se conectaron correctamente al saneamiento en su momento. Podría haber pozos negros debajo, así que debemos asegurarnos".

Según los técnicos municipales del área, en estos últimos veinte años se han clausurado más de una veintena de estos pozos en el Casco Viejo de Corralejo. El alcalde de La Oliva Isaí Blanco, valoró que el ayuntamiento "está verdaderamente comprometido con solucionar la situación en el Muelle Chico", un problema al que "no podemos darle la espalada, aunque lleve ahí toda la vida".

Entre los trabajos que ha realizado el Ayuntamiento de La Oliva en este último año de investigación, se encuentran la detección y clausura de dos pozos negros que no estaban conectados al saneamiento, y por lo tanto vertiendo al subsuelo, la renovación e impermeabilización del pozo de bombeo del espigón, la instalación de dispositivos de detección para evitar que se rebose, la utilización de un novedoso sistema de detección por colorantes, la excavación en la playa en busca de emisarios, la renovación de la antigua canalización de fibrocemento…

El Ayuntamiento de La Oliva inició hace aproximadamente un año una investigación en profundidad para tratar de determinar el origen delo foco o focos contaminantes que han dado lugar al cierre de la playa por las autoridades sanitarias en numerosas ocasiones durante las últimas décadas.

El Departamento de Salud Pública de la Dirección Insular del área de Sanidad y la institución municipal continúan monitorizando la zona con continuos análisis de la calidad del agua.