Guía práctica para mantener tu piscina todo el año
El aspecto menos atractivo (pero necesario) de tener una piscina particular es su mantenimiento. Con ello se garantiza la durabilidad de la instalación, la higiene en todo momento y que esté lista, en perfecto estado, para cuando quieras darte un chapuzón refrescante.
Hacerlo correctamente y a lo largo de todo el año puede parecer algo complejo si no se cuenta con mucha experiencia cuidando una piscina propia, sin embargo, al conocer al detalle los protocolos y tiempos, podrás darte cuenta de que no es para tanto. De hecho, puede resultarte entretenido en algunos momentos.
A continuación te mostraremos una guía práctica para que este proceso se te haga llevadero y para que tu estancia favorita luzca impecable a lo largo de todas las estaciones, ¡serás todo un profesional!
¿Cómo hacer un buen mantenimiento de la piscina?
Conseguir la piscina adecuada para ti puede ser todo un reto. Tendrás que decidir el tamaño y el estilo que estás buscando, hacer una pequeña inversión y enfocarte en la buena calidad de la instalación. Si todavía estás en este proceso, solo tienes que buscar en Piscinas Athena para hacerte con el modelo perfecto y también podrás comprar los productos necesarios para su mantenimiento.
Después de todo este esfuerzo y esta ilusión, lo lógico es que te preocupes por mantenerla en buen estado. Esta es una responsabilidad importante a partir de ahora, ya que de ello va a depender que puedas disfrutar realmente de ella y que cumpla con tus expectativas.
Lo primero que debes saber es que las técnicas de limpieza y acondicionamiento de una piscina van a depender de si esta se encuentra llena o vacía. Es posible que, en los meses fríos, la despojes de agua, mientras que durante el verano la mantengas a pleno rendimiento. No por ello debes abandonarla en ninguno de los dos casos.
Todo esto implica el llenado de la piscina, el cloro, los ajustes del PH, eliminar el agua turbia… cantidad de tareas que te irás encontrando a lo largo del año. En esta guía te las iremos desgranando para que puedas realizarlas todas de la manera más eficiente.
El mantenimiento de la piscina cuando está llena
Hacer un buen mantenimiento de la piscina cuando está llena puede ser bastante llevadero si te acostumbras a emplear regularmente un limpiafondos, pues este aparato puede hacer buena parte del trabajo por ti y conseguir que esté en buen estado durante más tiempo. Si tienes problemas con este aparato, en este artículo especializado encontrarás todas las soluciones.
Además, hay una serie de trabajos que deberás afrontar como pequeñas rutinas que son los siguientes.
Control y corrección del PH
El PH es una parte esencial de la piscina e interviene con la actuación del cloro, por lo que debes procurar que se mantenga en un nivel entre 7.2 y 7.6. Si este baja puede crear problemas de irritación en contacto con la piel, y si se eleva en exceso, simplemente no hará correctamente sus funciones. Lo puedes monitorizar fácilmente con un kit medidor, pues solo hay que poner un papel en el agua y ver el resultado que arroja por colores.
El nivel del cloro
El cloro es fundamental para que el agua estancada no genere infecciones y el baño resulte en todo momento saludable. Al comienzo de la temporada, lo que suele corresponder con el inicio del buen tiempo, hay que hacer una vertida de cloro de choque en el agua. Después, solo será cuestión de ir revisándolo y centrarse en el mantenimiento. Aunque dependerá del volumen de la piscina en cuestión, lo habitual es que solo se tenga que reponer el cloro una vez por semana.
Limpieza del agua
Cuando la piscina se usa diariamente puede que su agua se vuelva o poco turbia o se ensucie, también pueden existir fallos en las filtraciones que favorezcan este fenómeno. Lo más recomendado es aplicar entre 6 y 8 horas de filtración al día para mantener una buena higiene y hacerlo justo después de aplicar el PH para favorecer su disolución.
El nivel del agua
Este punto no cuesta nada, pues solo tendrás que fijarte en el estado del agua cada día y, sobre todo, en su nivel. En ocasiones, se pierde o se evapora el agua en exceso por diferentes motivos y poner el foco en ello te ayudará a prevenirlo. Si detectas esto, hay varios sistemas para solucionarlo, como las mantas para piscinas.
El mantenimiento de la piscina cuando está vacía
Hay cantidad de personas que deciden vaciar las piscinas durante el invierno porque no van a hacer uso de ellas. Si es tu caso, debes seguir los pasos correctos para hacer un buen mantenimiento de esta instalación. A continuación, te lo mostramos todo.
La limpieza de las paredes
Las pareces pueden acumular suciedad durante el uso e incluso tener algunas incrustaciones que conviene retirar para garantizar la higiene. Este será el momento perfecto para hacerlo y, para ello, solo tendrás que comprar productos químicos de limpieza especializados en piscinas. Estos se disuelven en agua, se aplican y se dejan actuar durante un tiempo para que ablanden la suciedad y sea muy sencillo eliminarla.
Una pequeña revisión
Otro punto importante es hacer una revisión sencilla de todos los elementos de la piscina: las instalaciones, los filtros, los accesorios… Comprobar que todo está correcto y que funciona como debe. Será un momento ideal para pararse en esta tarea y solucionar todo lo necesario antes de llenarla para la siguiente temporada.
Llenar la piscina de agua
Para llenar la piscina de nuevo es importante revisar otra vez que todo funciona como debe, especialmente si ha pasado mucho tiempo, y que nadie se introduzca dentro del vaso hasta que termine el proceso por completo. Se pone la bomba para que el agua se vaya haciendo paso y, cuando esté totalmente repleta, se realiza esa primera cloración de choque. Estará lista de nuevo para disfrutarla un verano más sin contratiempos.
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