La Fiscalía de Las Palmas solicita una pena de catorce años de prisión para Pedro Montelongo Bencomo por considerarlo culpable de un delito de homicidio, por la muerte en marzo de 2015 de Daniel Moreno Ibáñez, un joven de 26 años natural de Talavera de la Reina (Toledo), que vivía en el municipio de Pájara.

La vista oral del juicio, por el procedimiento del Jurado, comienza este lunes 7 de noviembre, en Las Palmas de Gran Canaria en la sección sexta de la Audiencia provincial. Según el relato de los hechos efectuado por la Fiscalía, el acusado mantenía una relación sentimental, que había comenzado en junio de 2014, con Jennifer Ruiz, la novia del fallecido, con quien convivía en Pájara. “Una relación simultánea a la relación pública y conocida a la que ésta mantenía con Daniel Moreno Íbañez”, señala el escrito de la fiscal. En marzo de 2015, Jennifer Ruiz habría decidido finalizar esa relación.

El 3 de marzo del año pasado, el acusado se dirigió al Hotel Magic Life, de Morro Jable, el establecimiento donde trabajaba Daniel Moreno. Sobre las 21:00 horas, cuando este último salía de su puesto de trabajo y se encaminaba hacia su coche, el acusado se acercó a él e intercambiaron unas palabras. Moreno se introdujo en el vehículo y el acusado le propinó entonces varias puñaladas en el cuello, el pecho, el hombro y las piernas.

Como consecuencia de esas puñaladas, le seccionó “completamente la vena yugular externa”, le provocó una herida en el tórax que le afectó en profundidad a la víscera pulmonar, y le hizo diversas heridas en la pierna. Daniel Moreno falleció antes de las 21:30 horas como consecuencia de la abundante pérdida de sangre y la asfixia provocada por esas heridas.

El caso fue instruido en el Juzgado número 5 de Puerto del Rosario y el acusado está ingresado en prisión provisional desde el 12 de marzo del año pasado. La familia del fallecido solicitó que el acusado, en caso de ser condenado, afronte la responsabilidad civil, que la Fiscalía determina en 90.000 euros más los intereses.

Además de los documentos, testigos y peritos, la Fiscalía solicita otras diligencias de prueba complementarias, como el análisis de las llamadas entrantes y salientes y la localización de los teléfonos del acusado y de la víctima. También se pide al Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses para que aclare a qué persona corresponden unos restos de sangre hallados en el vehículo donde falleció Daniel Moreno.

"Hay algo más detrás y queremos que se sepa"

La tía de la víctima, Ana Isabel Moreno, señalaba recientemente a Europa Press que quieren que se demuestre que el homicidio no se trató de un robo, como se apuntó en un principio sino que el crimen tenía un “móvil pasional”. La familia no entiende que el autor confeso mantenga que “no tenía nada en contra de Dani pero le mató de esa manera brutal y con enseñamiento”, cuando se ha demostrado además su relación con el entorno de Daniel y su pareja sentimental, Jennifer Ruiz.

Moreno señalaba que “hay algo más detrás y queremos que se sepa lo que le motivó a esa persona a matar a Daniel, y que pague por ello”. El acusado conocía detalles de la rutina diaria de la víctima que sólo podía conocer alguien cercano, ya que el fallecido, en principio, no tenía que trabajar el día de la agresión porque le habían cambiado el turno.

La familia destaca que el autor confeso ha pasado unas pruebas psicológicas que indican que no tiene ningún trastorno, y quiere “limpiar” la imagen de Daniel Moreno, “porque era un chico joven con una vida normal y sencilla, apasionado por su familia y por su novia”. “Si alguien motivó a que se cometiera el asesinato de mi sobrino, queremos que ese alguien también pague por ello", asegura la tía.