Por segunda vez, en menos de un mes, los agentes de la Demarcación de Costas de Canarias, acompañados también en esta ocasión por la Guardia Civil, han precintado y retirado las terrazas ilegales que invadían nuevamente el dominio público marítimo terrestre de la playa de La Goleta, en Corralejo.

Tras la primera actuación de Costas del pasado 23 de noviembre, en la que fueron retiradas y precintadas las terrazas del Bar La Galera Beach, del bar Toro Beach, del bar El Chiringuito, del bar Patai Beach y del bar Sand Beach, por ocupar todos ellos la zona de uso público de la playa, hace solo unos días el bar Galera Beach comenzó poco a poco a colocar otra vez  sus sillas y mesas en la misma zona donde hace pocas semanas habían sido retiradas y precintadas por las autoridades.

Se da la circunstancia de que Costas lleva sancionando reiteradamente a este  bar por el mismo motivo desde el año 2017, y además precintó por vez primera su terraza en 2019 sin que sirviera de mucho, pues su propietario Antonio Hormiga, presidente de la patronal turística Asofuer, rompió el precinto.

Este pasado mes de mayo, Hormiga fue condenado por este delito de desobediencia por el Juzgado de lo Penal número dos de Puerto del Rosario, si bien la petición de la Fiscalía de un año de cárcel quedó reducida a una multa al admitir el acusado su culpa.

Las sanciones de Costas implicaban la retirada de la terraza, pero Hormiga encontró otra solución: traspasó el bar a Alexander Lemes Baxter, y así la terraza ilegal siguió sobre la arena hasta el pasado día 23 de noviembre, cuando fue precintada.

Además, el Ayuntamiento de La Oliva, en el pleno celebrado a finales de octubre, decidió el cierre del bar La Galera por no contar con licencia para la actividad hostelera, que ha venido desarrollando desde el año 2008, cuando Antonio Hormiga transformó uno de los apartamentos residenciales del complejo La Galera de su propiedad en un bar de playa y extendió su terraza sobre la arena. Hasta la fecha, el Consistorio no ha clausurado el bar.

Por otro lado, las autoridades de Costas también  obligaron a retirar la terraza del bar Patai, que igualmente había sido precintada el pasado día 23 de noviembre y que en los últimos días había extendido otra vez sus sillas y mesas sobre la arena.

La licencia de apertura de este bar está requerida al Ayuntamiento de La Oliva hace más de un mes por diversos grupos ecologistas, sin que hasta ahora hayan obtenido respuesta.

Asimismo, Costas también ha obligado en su actuación de este miércoles a que el bar Sand Beach desocupe la servidumbre de tránsito, al menos en parte, pues tras la intervención del 23 de noviembre, el establecimiento no había vuelto a extender su terraza sobre el dominio público, pero si había ocupado nuevamente la zona de arena en la servidumbre de tránsito.

Al igual que en el caso del Galera Beach, el local que actualmente ocupa el bar Sand Beach era antes un apartamento residencial de un dormitorio, propiedad de Hormiga, que fue transformado en un bar de playa. Cuando Costas, en junio de 2021, le abrió el primer expediente y le impuso la primera multa, Hormiga traspasó el bar a Karim el Kaddouri el Kattabi, que es quien rige el negocio actualmente.