La diputada de Asamblea Majorera–Coalición Canaria Fuerteventura, Natalia Évora Soto, trasladó ante el Pleno del Parlamento de Canarias su preocupación por el proceso de desmantelamiento de la central térmica de El Charco, en Puerto del Rosario.

Con ello, la diputada se suma a la reivindicación de la presidenta del Cabildo, Lola García, y el alcalde de Puerto de Rosario, David de Vera, para acabar con el desarrollo de proyectos energéticos en dicha zona y comenzar el cierre progresivo de la central.

En su discurso, Évora apoyó y valoró el trabajo realizado tanto por parte de la presidenta como del regidor municipal de la capital, quienes, junto a la diputada de Coalición Canaria en el Congreso de los Diputados, Cristina Valido, se trasladaron en el día de ayer a Madrid para solicitar al propio Estado que iniciará acciones para cerrar dicha planta.

Como contestación, durante la sesión plenaria, el consejero de Transición Ecológica del Gobierno de Canarias, Mariano Hernández Zapata, adquirió el compromiso, al igual que lo hizo Clavijo en el acto del congreso insular Fuerteventura el pasado sábado, de trabajar para dar el cierre a dicha planta "lo antes posible".

Según explicó la diputada, la central térmica del Charco, cuenta con motores de más de 45 años, que generan un alto nivel de contaminación. De esta forma, Natalia Évora denunció que el sistema energético de Canarias se encuentra "debilitado" debido a su alta dependencia de los combustibles fósiles.

Además, Évora Soto señaló que en Canarias hay otros casos similares como Los Guinchos en La Palma "donde también se debe valorar una actuación urgente", aseguró.

La planificación, clave en el desarrollo energético de Canarias

Para Évora es imprescindible determinar cuál será el modelo energético para Canarias. Según la diputada, la planificación energética debe trabajar en nuevos sistemas de almacenamiento y hacer un esfuerzo para que "cada isla tenga el suyo propio", añadió.

En relación con esto, Évora insistió en la importancia de "tener en cuenta las singularidades de cada isla" para que las estrategias y actuaciones que se ejecuten sean resultado del acuerdo y la colaboración institucional.

Por otro lado, la diputada majorera propuso al gobierno convertir la declaración de emergencia energética en "una oportunidad" para aprovechar las novedades que aporta la Ley de Cambio climático y Transición Energética, y, mientras las administraciones locales culminan su planificación, se establezcan en los techos, tanto públicos como privados, las zonas de aceleración las instalaciones fotovoltaicas.