Marta Lloret lidera el servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín, un equipo que desde el pasado junio se desplaza a Fuerteventura para prestar el tratamiento de oncología radioterápica a través de una unidad satélite ubicada en el Hospital General de Fuerteventura.

La nueva unidad hará que unas 250 personas al año con diagnóstico de cáncer no tengan que seguir desplazándose a Gran Canaria para recibir un tratamiento de radioterapia que, en ocasiones, puede durar hasta siete semanas.

Tampoco será ya necesario que los pacientes se desplacen para las consultas de seguimiento de su enfermedad oncológica. Aun así, la especialista insiste en que el paciente va a seguir recibiendo el mismo tratamiento y seguimiento en Fuerteventura que el que se hace en el Hospital Doctor Negrín y “con la misma calidad porque los pacientes van a ser valorados por los mismos médicos y la planificación continuará realizándose por el mismo equipo”.

Diversos estudios coinciden en que los desplazamientos interminables para someterse a un tratamiento radioterápico afectan en la salud y en la calidad de vida del paciente y ven en la unidad satélite el modelo más idóneo para unir a los pacientes de zonas pequeñas con centros especializados. “Realizar un tratamiento oncológico en un entorno amigable repercute de forma favorable en el estado general de los pacientes y en el resultado del tratamiento”, insiste Lloret.

-Fuerteventura cuenta desde el pasado mes de junio con una unidad satélite de oncología radioterápica en su hospital, pero ¿exactamente qué significa este sistema?

-Una unidad satélite en Fuerteventura significa que va a tener a su disposición todos los recursos humanos y de equipamiento que están en el Doctor Negrín. De esta manera, se sigue manteniendo para los pacientes de Fuerteventura la misma cartera de servicios que existe en el Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín, una de las más amplias a nivel nacional. Si se hubiera optado por montar un servicio independiente, este sería mucho más limitado en recursos y técnicas disponibles para los pacientes.

-¿Podrán tratarse en ella todos los pacientes oncológicos de la Isla que requieran un tratamiento radioterápico?

-La unidad satélite permitirá tratar a la mayoría de los pacientes de Fuerteventura, pero habrá algunos usuarios que tendrán que seguir yendo a Gran Canaria para completar su tratamiento de radioterapia o para someterse a técnicas complejas de radioterapia que solo se realizan en servicios con gran experiencia como el del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín. Sin embargo, hay que destacar que la mayoría de los pacientes de Fuerteventura podrán realizar su tratamiento de radioterapia externa con el equipo que se ha instalado en el Hospital majorero.

-¿Cuántas personas de Fuerteventura no tendrán que trasladarse a Gran Canaria para someterse a un tratamiento de radioterapia oncológica?

-Nosotros hemos hecho una estimación de unos 250 pacientes de Fuerteventura que todos los años se tratan en el Negrín. Con la puesta en marcha de la unidad satélite evitamos los desplazamientos derivados de las consultas y de las sesiones de tratamiento. El paciente solo se tendrá que desplazar a Gran Canaria para la primera visita con el especialista. Todo lo demás lo podrá realizar cerca de su domicilio.

“Entre 240 y 260 pacientes al año recibirán un tratamiento de radioterapia”

-El tratamiento es fundamental, pero también el seguimiento a los pacientes. Desde hace algún tiempo también se puede llevar a cabo en Fuerteventura…

-Sí. El paciente oncológico necesita que se le realice un seguimiento para poder detectar posibles recaídas y solucionar los efectos secundarios de los tratamientos. Desde el 13 de junio los pacientes ya pueden realizar este seguimiento en el hospital de Fuerteventura. Además, son vistos por los mismos especialistas que están en el Negrín. Por tanto, no cambia absolutamente nada en cuanto a calidad asistencial. Lo único distinto es que el paciente no se tiene que desplazar a Gran Canaria. A los 250 pacientes que mencionábamos antes, hay que sumarle los 1.500 que cada año venían a Gran Canaria para hacer el seguimiento de su enfermedad.

-¿Qué beneficios supone para un paciente oncológico no tener que desplazarse a otra isla para someterse al tratamiento radioterápico?

-Dejar cerca de su domicilio al paciente durante el tratamiento le permite seguir en un entorno conocido. El hecho de tener un cáncer coloca al paciente en una situación de estrés. Si a ese estrés le sumamos el hecho de tener que desplazarse y estar fuera de su domicilio y de su entorno familiar y amigos, que son quienes le aportan el soporte, esa situación de estrés aumenta. Realizar el tratamiento en un entorno amigable repercute de forma favorable en los pacientes y en el resultado del tratamiento.

-¿Cuántos pacientes calcula que se tratarán a lo largo del año en el búnker de Fuerteventura?

-Se tratarán unos 20 pacientes por mes. Hablamos entonces de entre 240 y 260 pacientes al año que recibirán un tratamiento de radioterapia. Es verdad que hasta ahora ha habido pacientes que no se trasladaban a Gran Canaria porque no se podía asumir el coste físico y emocional del traslado. Hablamos, sobre todo, de pacientes metastásicos que podrían beneficiarse de un tratamiento paliativo con radioterapia. Creo que con la puesta en marcha de esta unidad satélite va a haber muchos pacientes que se beneficien del tratamiento de radioterapia paliativa, es decir, radioterapia para paliar síntomas, lo que va a hacer que ese número de pacientes tratados vaya aumentando.

“La unidad va a facilitar que los pacientes reciban en tiempo y forma el tratamiento”

-¿Le consta que ha habido pacientes que para evitar el desplazamiento a Gran Canaria habían decidido renunciar a la radioterapia?

-Cuando hemos detectado este problema hemos intentado solucionarlo con ayuda de los trabajadores sociales. A pesar de esto, es probable que algunos pacientes hayan renunciado al tratamiento por la lejanía. Estamos segurísimos de que la unidad satélite en la Isla va a facilitar que todos los pacientes que necesitan radioterapia en Fuerteventura la reciban en tiempo y forma.

-¿Cuáles son los cánceres que más se diagnostican en Fuerteventura?

-Fuerteventura no es diferente a Gran Canaria u otra isla canaria ni al resto de España. Los tumores más frecuentes son el de mama y el de próstata. También encontramos pacientes con cáncer de cuello, tumores cerebrales, de pulmón. En líneas generales, no podemos decir que destaque más un cáncer en Fuerteventura que en otras islas.

-¿Cómo afectaba a su salud tener que hacer largos desplazamientos hasta llegar a la radioterapia?

-Estos desplazamientos afectan en general, aunque los profesionales intentábamos minimizar ese impacto negativo. Minimizar también el desamparo al que se podían ver expuestos. Intentábamos que esos desplazamientos se realizaran en un entorno lo más amigable posible. Si nos pedían adelantar la cita, para poder irse en un avión antes, o retrasar un tratamiento para que no tuvieran que madrugar o tuvieran que venir la noche anterior lo hacíamos. Precisamente porque se conoce el impacto negativo de los desplazamientos sobre la enfermedad es por lo que se propuso y se aceptó instalar una unidad satélite en Fuerteventura.

-Desde el punto de vista de la salud mental, ¿cómo va a ayudar a los pacientes oncológicos la cercanía al lugar de tratamiento?

-A nivel de salud mental les va a proporcionar tranquilidad, tanto a los pacientes como a sus familiares. Tener una enfermedad es estresante y más cuando es un cáncer. Ahora, los pacientes saben que el tratamiento y el seguimiento lo van a poder hacer cerca de casa. También son conscientes de que ante cualquier problema que surja siempre les será más fácil acercarse al hospital que trasladarse a otra isla.

“Tras el Covid, estamos viendo cánceres más avanzados que anteriormente”

-¿Cuántas personas forman la unidad?

-La unidad está formada por un personal estable compuesto por tres técnicos de radioterapia, dos enfermeras, una auxiliar de enfermería y una administrativa. A estos se suman los oncólogos radioterápicos y los radiofísicos del Hospital Doctor Negrín que cada día se van a desplazar a Fuerteventura. La unidad satélite de Fuerteventura dispondrá, por tanto, de los 90 profesionales del Servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Doctor Negrín, que será donde se continúe realizando la valoración inicial del paciente y donde se planificará el tratamiento de radioterapia con los mismos protocolos. La unidad satélite permite acercar el tratamiento a los pacientes a su domicilio, pero también mantener la calidad asistencial. Todo el personal y recursos del Doctor Negrín siguen a disposición de los pacientes de Fuerteventura.

-¿Cómo afectó la pandemia a los pacientes de cáncer?

-Ha afectado, sobre todo, en que ha habido retrasos en los diagnósticos. Prácticamente, estuvimos tres meses en casa. La gente tenía miedo a salir y tampoco consultaba. Al haber menos disponibilidad de consultas médicas y de pruebas diagnósticas, todo se fue retrasando. Hemos notado que, después de casi tres años de Covid, estamos viendo cánceres más avanzados que los que veíamos antes. Esperemos que esto se vaya resolviendo en los próximos meses.

-¿Qué mensaje de tranquilidad transmitiría a las personas que temen tratarse en la Isla por temor a contar con menos servicios o por estar en un hospital más pequeño?

-La creación de la unidad satélite en el Hospital de Fuerteventura es la mejor garantía de la calidad asistencial del paciente. Estamos acercando no solo el tratamiento de radioterapia, sino también el seguimiento de los pacientes cerca de su domicilio. Somos los mismos profesionales los que estamos valorando, planificando, indicando tratamientos y haciendo el seguimiento a los pacientes. Por tanto, la calidad asistencial sigue siendo la misma, pero mejorada debido a la proximidad al domicilio.

-La mejor medicina contra el cáncer es la prevención. ¿Cómo podemos prevenirlo?

-Lo más adecuado es hacer una vida saludable y eso conlleva no fumar, hacer una dieta adecuada, ejercicio y evitar el sobrepeso. Eso sirve para el cáncer, pero también para otras enfermedades como las cardiacas. Hacer una vida saludable va a permitir prevenir el cáncer y, en caso de tenerlo, vamos a poder tener un organismo fuerte y preparado para poder soportar los tratamientos oncológicos. Si tenemos un organismo bien preparado, los tratamientos oncológicos se tolerarán mucho mejor y eso repercute en los resultados.