SALUD

“Se recomienda ir al psicólogo desde que la persona sufre emocionalmente”

Christina María Cop y María del Carmen Mesa, psicólogas de Hospital Parque

Diario de Fuerteventura 0 COMENTARIOS 19/08/2021 - 10:07

Christina Cop y María del Carmen Mesa se encuentran al frente del área de Psicología del Hospital Parque, un servicio que la clínica lleva a cabo en sus instalaciones de Puerto del Rosario, de lunes a viernes, en horario de mañana y tarde, y un día a la semana en Corralejo. Estas dos profesionales sanitarias trabajan con niños, adolescentes y adultos distintas terapias enfocadas a todas las áreas de la psicología.

-¿Cuáles son las áreas de la psicología que atienden los profesionales de Hospital Parque?

-Christina Cop (C.C.): Trabajamos todas las áreas relativas a la psicología clínica. La mayoría de los casos por problemas de ansiedad y depresión. También llegan personas con trastornos de alimentación, obsesiones, trastornos sexuales, problemas familiares, de pareja u otros como los trastornos de conducta en niños y adolescentes.

-¿Qué tratamientos ofrecen?

-María del Carmen Mesa (M.C.M.): Una terapia psicológica individualizada, adaptada y adecuada según el caso, donde, en primer lugar, exploramos cuál es el motivo de consulta y analizamos de qué manera afecta, para después aportar diversas herramientas y técnicas para ayudar a la persona a afrontar el malestar emocional por el que ha decidido acudir a terapia.

-¿Cuáles son los síntomas que nos indican que tenemos que acudir a un especialista en psicología?

-C.C.: Desde el momento en el que la persona nota que sufre a nivel emocional y percibe que le cuesta salir de ahí. No necesariamente debe tener un trastorno determinado o sufrir un problema grave. Puede buscar ayuda simplemente porque no se siente bien en cualquier área de su vida y no sabe cómo sentirse mejor. Eso indica que puede necesitar ayuda. Pongamos el siguiente ejemplo: cuando alguien decide ir al gimnasio y ponerse en forma, no necesariamente debe tener un problema de obesidad para ir al gimnasio. La persona simplemente quiere sentirse mejor y busca ayuda profesional que le oriente sobre qué cosas puede hacer para conseguir el objetivo de estar mejor físicamente. A nivel psicológico es igual. No hay que estar ‘loco de la cabeza’ como mucha gente piensa.

-¿Hay estigmas a la hora de acudir a un psicólogo?

-M.C.M.: Sí. Se ha avanzado en ese tema, pero aún sigue habiendo ideas preconcebidas a la hora de acudir al psicólogo. Hay personas que vienen a consulta sin haberles dicho nada a sus familiares y personas cercanas, porque piensan que se van a reír o van a sentirse avergonzados por el hecho de necesitar ir a un psicólogo.

-¿Y qué diría a esas personas que aún dudan en ir a ese tipo de profesionales?

-C.C.: Les diría que buscar ayuda profesional cuando sufrimos a nivel psicológico es una acción de autocuidado mediante la cual podemos poner en práctica formas eficaces de solucionar, superar y/o afrontar esas situaciones que nos generan malestar. Además, lo van a poder hacer en un espacio de confianza y confidencialidad absoluta, sin ser juzgados, y siempre desde la comprensión y empatía, buscando proporcionar unas pautas que se ajusten a las peculiaridades y necesidades de cada persona.

-¿Cuáles son los síntomas que presentan los niños y adolescentes de la Isla que acuden a sus consultas?

-M.C.M.: No se distinguen mucho de los síntomas que pueden presentar los adultos, aunque la forma de manifestarlos pueda ser distinta como, por ejemplo, en el caso de la depresión. Muchos niños presentan una hiperactividad aparente que, en realidad, enmascara un sufrimiento emocional de base, ya sea ansiedad, tristeza, inseguridad, etcétera. También presentan con más frecuencia poca tolerancia a la frustración, habilidades sociales deficientes y baja autoestima.

-¿Qué terapias utilizan para trabajar con niños y adolescentes?

-C.C.: También nos centramos en proporcionar una terapia psicológica individualizada, adaptada y adecuada según el caso, como con los adultos, pero, en estos casos, la adaptación se centra también en la edad. Cuando son muy pequeños, por ejemplo, muchas veces trabajamos solo con los padres. En general, hacemos más uso de estrategias creativas como, por ejemplo, cuentos personalizados y otras herramientas dinámicas como los juegos adaptados, que facilitan el proceso terapéutico en la población infanto-juvenil.

-Aún sigue habiendo menores con miedo a decir en sus casas su verdadera orientación sexual, ¿Qué papel juegan los psicólogos en todo este proceso?

-M.C.M.: Intentamos aportarles las herramientas necesarias y orientarlos para que puedan adquirir la seguridad y confianza necesarias a la hora de comunicárselo a las personas más cercanas y quitar estigmas. Incluso, hay personas adultas con edad avanzada que no se atreven a compartirlo con familiares. Les queda un sentimiento de culpabilidad o vergüenza por creer que van en contra de lo que supuestamente es normal.

-Tras el fallecimiento de una persona, ¿a partir de cuándo debemos ponernos en manos de un psicólogo?

-C.C.: Puede ser desde el principio, a modo de acompañamiento emocional. No obstante, siguiendo los criterios establecidos, se recomienda buscar ayuda si dura más de seis meses con una intensidad que impide que la persona se desenvuelva con normalidad en la vida diaria. Si la persona se siente bloqueada por ello, no debe dudar en buscar ayuda.

“Hay niños que parecen hiperactivos pero tienen sufrimiento emocional”

-¿Cómo se puede combatir el miedo a la Covid y, poco a poco, volver a la normalidad?

-M.C.M.: Es importante explorar cuáles son las creencias y pensamientos relacionados con esta situación que desencadenan ese miedo irracional y, después, aprender estrategias para regularlo como, por ejemplo, técnicas de relajación e identificación y cuestionamiento de pensamientos irracionales que facilitan el estrés emocional.

-¿Cómo trabaja Hospital Parque para aumentar la autoestima de los pacientes?

-C.C.: Es difícil resumir un proceso tan complejo en tres líneas, pero, básicamente, hay que crear una rutina diaria de autocuidado (buena alimentación, ejercicio físico, buen descanso, etcétera), pero también es fundamental explorar las creencias que tiene esa persona sobre sí misma e ir, poco a poco, modificando todo eso hacia un autoconcepto más realista y positivo. Al tratarse de cómo nos sentimos con nosotros mismos y de nuestras creencias, lo llevamos dentro de nuestra cabeza dondequiera que vayamos y nos afecta en cada una de las áreas de nuestra vida.