En el marco de actividades organizadas por el Ayuntamiento de Puerto del Rosario junto con la Federación de Asociaciones de Mujeres Arena y Laurisilva (FAMAL) por el 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, se impartió, en la Casa de la Cultura de la capital, la mesa divulgativa Periodismo y Violencias Machistas ‘Otras formas de comunicar son posibles’ sobre periodismo responsable, riguroso y ético.

Una veintena de personas pudieron disfrutar de esta jornada formativa en Casa de la Cultura, Puerto del Rosario, generando un espacio de pensamiento, reflexión y práctica para construir un periodismo y una comunicación que contribuya a la transformación social y haga frente a los bulos, al sensacionalismo, al negacionismo y a los discursos de odio.

En esta jornada, que se podía seguir también por streaming en las redes de la Federación, se profundizó en las claves para construir informaciones que incluyan la perspectiva de género, es decir, para ejercer un periodismo de calidad con rigor y responsabilidad. Las ponentes fueron Idaira Martin Martínez, periodista, divulgadora y creadora del proyecto 'deconstruyendo educación', y Nadia Martín García, periodista y fotógrafa especializada en el Máster en Estudios Interdisciplinares de Género, y Premio Joven Canarias 2023 que ha colaborado además en medios como El Salto Diario y La Provincia, entre otros.

Asimismo, se puso en conocimiento el último estudio sobre el tiempo que tardan las víctimas de violencia de género en verbalizar su situación de la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género y que, tras analizar 1.201 casos, concluye que es de ocho años y ocho meses

También se indagó en las violencias machistas como un problema estructural que requiere de toda una responsabilidad e implicación social para prevenirse, detectarse y erradicarse desde la raíz. Pues como recoge la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, no se trata de un problema que solo afecte al ámbito privado. Al contrario, se manifiestan como el símbolo más brutal de la desigualdad existente en nuestra sociedad.

FAMAL explica que “la violencia machista es un problema estructural y acabar con él requiere de la implicación de toda la sociedad, lo que incluye a los medios de comunicación de manera directa, contando con artículos concretos que recogen la responsabilidad de los medios, no solo en informar rigurosamente, sino en tomar un papel activo en la prevención de estas violencias dada su influencia en la opinión pública y en la construcción de imaginarios colectivos. Así, la difusión de informaciones relativas violencias machistas garantizará la defensa de los derechos humanos, libertad y dignidad de las víctimas”.

“A través de bulos sobre violencia machista se cuestiona más a las víctimas. Este juicio social es uno de los diversos motivos que hacen que sea aún más complicado salir de esa situación de violencia”, añade.

Además, se ofrecieron diversos recursos, guías didácticas, manuales de redacción, códigos deontológicos del periodismo y literatura feminista con la que poder seguir aprendiendo a construir unas informaciones que aboguen por el bien común.