La Audiencia Provincial juzga este martes al acusado de asaltar una churrería en Puerto del Rosario, arrancar la caja registradora y llevarse la recaudación del establecimiento.

La Fiscalía acusa al procesado, con “múltiples” antecedentes penales por delitos de robo con fuerza, de haber entrado en un establecimiento comercial de la capital majorera sobre las cinco de la madrugada del 10 de junio de 2020.

El local se encontraba cerrado al público. Sin embargo, según la Fiscalía, “el acusado golpeó el cristal de la puerta de acceso al establecimiento, lo rompió y accedió a su interior”.

“Una vez en su interior, el acusado se dirigió a la caja registradora, la cual contenía 700 euros, la arrancó y se la llevó consigo, huyendo acto seguido del lugar”, añade el escrito de acusación.

La propietaria de la churrería no reclama por el importe de los bienes sustraídos ni por los daños causados en el establecimiento de su propiedad, al haber renunciado expresamente a ello ante el Juzgado de Instrucción.

Los hechos narrados son constitutivos de un delito de robo con fuerza en las cosas cometido en establecimiento comercial fuera de las horas de apertura.

El Ministerio Fiscal pide que se aplique “la circunstancia agravante de multirreincidencia”.

Así, la Fiscalía solicita que se le imponga una pena de siete años y seis meses de prisión.