El Plan de Transición Energética de Canarias (PTECAN) que se encuentra en exposición pública por parte del Gobierno autonómico, contempla para Fuerteventura un área potencial de 134 kilómetros cuadrados para instalar aerogeneradores y un espacio similar, apenas un kilómetro cuadrado menos, para colocar plantas fotovoltaicas.

Según los planos del PTECAN, se podrían instalar aerogeneradores y placas por buena parte de la geografía insular, tanto en áreas costeras como del interior en La Oliva, con intensidad en el interior del municipio capitalino, así como en el entorno industrial de Antigua, en gran parte de Tuineje o en los alrededores de Costa Calma, entre otras localizaciones.

En los últimos años se ha generado una ola de rechazo social a la instalación de parques eólicos sin una ordenación territorial previa, próximos en algunos casos a viviendas, como sucede en El Time, pendiente de que resuelvan los tribunales.

Aunque se anunció desde el Cabildo la aprobación de instrumentos de planeamiento para encauzar dónde se podría y dónde no colocar aerogeneradores y placas fotovoltaicas, no se aprobó ni la Ordenanza insular para fijar criterios de instalaciones energéticas en suelo rústico ni el Plan Territorial Especial que ordenaría los parques eólicos y las plantas fotovoltaicas en la Maxorata.

Con la Ley de Cambio Climático de Canarias, aprobada el pasado mes de septiembre, es el citado PTECAN, que elabora el Ejecutivo regional, el que establece “los criterios de localización de las instalaciones de energía renovable” en las Islas, con una vigencia de 10 años, aunque se puede prorrogar por más tiempo o revisar a los cinco años. Lo que contenga el Plan del Gobierno de Canarias será “de obligado cumplimiento”.

“Una de las externalidades de mayor importancia” que se prevé, según se reconoce en el documento, es “la ocupación del territorio para la satisfacción de las necesidades energéticas”.

En el año 2023, según las cifras del Gobierno, en Fuerteventura hay instalados unos 77 megavatios de potencia en aerogeneradores. Dentro de siete años, el objetivo es superar los 241 megavatios instalados. Si la potencia instalada en placas solares es en la actualidad de 26 megavatios, en el horizonte de 2030 se aspira a rondar los 78 megavatios.

“De la potencia fotovoltaica propuesta, el 70,8 por ciento está asociada a plantas instaladas en tierra o sobre cubierta, el 25,9 por ciento está asociada al autoconsumo en edificios o viviendas, distribuido por toda la geografía insular, y el 3,4 por ciento restante proviene de plantas fotovoltaicas flotantes”, apunta el Plan.

En cualquier caso, la fuente renovable “predominante” en el futuro inmediato será la eólica terrestre, “proporcionando energía durante todo el año, aunque bastante menos durante septiembre, octubre y diciembre”. El Gobierno espera que cubra más de la mitad de las necesidades de la Isla.

Conexión con Gran Canaria

El PTECAN indica que “otra interconexión eléctrica que sería muy beneficiosa para Canarias sería el enlace entre Fuerteventura y Gran Canaria”, ya incluida en la planificación y “con puesta en servicio posterior a 2026”.

“Esta interconexión permitiría unificar los sistemas eléctricos de las islas de Lanzarote, Fuerteventura y Gran Canaria, incrementando de forma notoria la robustez del sistema eléctrico en su conjunto”, añade el Plan del Gobierno autonómico, que concentraría el almacenamiento en Gran Canaria.