TRIBUNALES

Dos nuevas sentencias avalan a los vecinos frente a la trama del casco viejo de Corralejo

Los residentes suman ya 123 sentencias favorables y el Juzgado destaca que sobre la cuestión litigiosa “llueve sobre mojado”

Diario de Fuerteventura 1 COMENTARIOS 21/02/2024 - 11:18

Una vez más, los Juzgados de Puerto del Rosario vuelven a dictar dos nuevas sentencias favorables a los vecinos del pueblo marinero de Corralejo, sentencias que acreditan “con rotundidad que las casas que se encuentran enclavadas en el casco histórico son edificaciones construidas y poseídas en concepto de dueños por vecinos de la zona aunque no tuvieran su derecho de dominio inscrito en el Registro de la Propiedad”.

Uno de los procedimientos, dirigido por el letrado grancanario Sebastián Socorro Perdomo, de la firma SOCORROLEY & Asociados, hace referencia a la casa de los herederos de Marcelino Umpiérrez Calero y María González Carballo, vivienda existente en la localidad de Corralejo, cerca del parque infantil, sita en la calle la Milagrosa número 43, que cuenta con una superficie total de 182 metros cuadrados.

Y el otro procedimiento, defendido por el letrado grancanario Javier Medina Medina, recayó sobre la vivienda de Rosa Hernández Morera y Rafael Melo Duque, que se encuentra ubicada en la calle La Iglesia y cuenta con una superficie de 67,94 metros cuadrados.

Sobre la primera vivienda, el juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número cuatro de Puerto del Rosario, Ignacio Valledor Hormazabal, señala que aunque la finca Registral 951 se denominara “del casco de Corralejo” y comprendiera toda la superficie de dicho casco, no comprendía las viviendas que estaban siendo poseídas a título de dueños por los vecinos del pueblo aunque no estuviesen amparadas por la fe pública registral.

El Juez considera más que probado que, una vez analizada toda la documental que figura en el expediente judicial, así como la testifical del perito topográfico y de dos vecinas del pueblo de toda la vida, la finca litigiosa le pertenece a los vecinos que han residido en la vivienda desde siempre.

Ante las numerosas sentencias dictadas por distintos Juzgados de Puerto del Rosario sobre casos absolutamente idénticos y muy próximos a la finca litigiosa, el juez Hormazabal concluye que “llueve sobre mojado”, de tal manera que es incuestionable que los legítimos propietarios de la viviendas que se encuentran en el casco antiguo de Corralejo,  no son otros sino los vecinos que han vivido en ellas desde tiempo inmemorial.

En cuanto a la segunda vivienda citada, la Jueza del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número cinco de Puerto del Rosario, Deborah Fátima Ruíz Molina, considera que con los documentos que consta en autos, licencia de construcción, licencia de acometida, documentos de solicitud de instalación eléctrica, recibos de tributos locales, así como la testifical practicada en el acto de la vista quienes manifestaron que los actores han poseído el inmueble de forma pública y en condición de dueños, son pruebas más que suficiente para estimar la demanda y declarar que los demandantes son los legítimos propietarios de la finca litigiosa.

Así, condenar a la entidad mercantil Delval Internacional, administrada por José Manuel Jiménez del Valle, principal acusado en la vía penal por los vecinos de Corralejo y la Fiscalía, a estar y pasar por esta declaración, con abstención de realizar cualquiera acto perturbador del dominio declarado y a pagar las costas del procedimiento. La sentencia en el procedimiento penal está pendiente de hacerse pública.

Resultados judiciales

Con estos dos nuevos resultados, ya se contabilizan 123 resoluciones judiciales favorables a los vecinos del pueblo marinero de Corralejo: 61 de los Juzgados de Primera Instancia de Puerto del Rosario, 43 de la Audiencia Provincial y 19 del Tribunal Supremo.

Comentarios

Con tantas sentencias ganadas por los vecinos lo único que cabe es interverle las propiedades a esa sociedad que está más que demostrado la mala fe con que ha actuado y destinar todos sus bienes al pueblo legítimo de Corralejo y sus vecinos.

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