Movimientos tácticos en el Cabildo de Fuerteventura. Coalición Canaria y Partido Popular se han aliado y han pedido un pleno extraordinario para “poner en marcha la elaboración de un nuevo proyecto de presupuesto” para 2021, después de que el presentado por el grupo de gobierno fuese tumbado ante la ausencia de los consejeros Sergio Lloret y Marcelino Cerdeña.

Tras la destitución de Lloret y Cerdeña, ambos del grupo NC-AMF, el equipo de gobierno de Blas Acosta (PSOE) está en minoría. Fuentes socialistas aseguran que han abierto negociaciones con Coalición Canaria y PP para garantizar la mayoría en el Cabildo.

Por otro lado, Marcelino Cerdeña ha presentado su dimisión, que tiene que ser ratificada en pleno, para que pase la siguiente de la lista, Sandra Domínguez, diputada autonómica, que podría firmar una moción de censura contra Acosta en alianza con CC y PP.

No obstante, la petición de pleno extraordinario de nacionalistas y populares se ciñe a la elaboración de un nuevo presupuesto ante “la inacción del grupo de gobierno durante las dos últimas semanas tras el rechazo del anterior documento”.

Este lunes, Blas Acosta anunció que se prorrogaba el presupuesto de 2020, lo que en la práctica ofrece operatividad a la institución insular. Además, ha convocado “de forma inmediata” a los grupos políticos para “abordar un nuevo proyecto de presupuesto para el año 2021”.

Acosta dijo que bajo su “coordinación” se tratará de “encontrar los consensos necesarios y tramitar a la mayor brevedad posible un nuevo proyecto de presupuesto para el 2021, unas cuentas que resultan necesarias para la reactivación socioeconómica de Fuerteventura”.

Desde la oposición se destaca que el proyecto que no prosperó en el último pleno fue facilitado “con un plazo de apenas 48 horas para su estudio y presentación de posibles enmiendas”, un plazo de tiempo “a todas luces insuficiente”.

A pesar de ello, CC y PP señalan que se presentaron más de medio centenar de enmiendas y que “en la Comisión de Cuentas solo se aceptó una relacionada con el apoyo a las asociaciones de defensa del pueblo saharaui”.

“La principal razón expuesta por el grupo de gobierno de para rechazar el resto de enmiendas es que ya no tenía tiempo de realizar las modificaciones que requerirían, que los plazos fijados eran muy ajustados y porque la decisión era que estuvieran sujetas a un crédito de 38 millones de euros que pretendía pedir a los bancos”, señalan en un comunicado.

“Endeudar a los majoreros”

Desde la oposición se cuestiona que “los presupuestos pretenden endeudar a los majoreros y majoreras con un crédito de 38 millones de euros, que se pretende negociar con los bancos, a pesar de contar con 111 millones de euros de remanente de Tesorería disponibles para el ejercicio 2021”.

Mientras tanto, añaden, “los recursos de apoyo a la atención social en los ayuntamientos siguen siendo insuficientes” y “las inversiones en infraestructuras de cercanía a las necesidades vecinales brillan por su ausencia”. Además, consideran que “la dotación de recursos en materia de  gestión y planificación hidráulica es claramente insuficiente”, así como el apoyo a pequeñas empresas y autónomos, o la “activación laboral frente al desempleo”.

“En síntesis, este documento de previsiones presupuestarias del Cabildo no respondía, por lo tanto, a las necesidades de una sociedad que sufre la mayor tasa de desempleo real de su historia reciente”, recalca la oposición.

También critican que la decisión de negociar unas nuevas cuentas por parte del presidente del Cabildo haya llegado “tarde”, después de que CC y PP registraran el lunes por la mañana la petición de un pleno extraordinario.

En esa sesión se abordaría “un cronograma de trabajo que coordine el presidente del Cabildo junto a los portavoces de los distintos grupos políticos, para tramitar cuanto antes y con el mayor consenso político y social posible, el nuevo proyecto de presupuestos para 2021”.