Luis Bravo (Gran Canaria, 1993) es médico especialista en Medicina de Familia. Trabaja en la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital General de Fuerteventura y, desde mayo, es vocal de la nueva junta del Colegio de Médicos de Las Palmas. En esta entrevista, Bravo hace una radiografía de la sanidad de la Isla en la que destaca una sobrecarga asistencial; listas de espera en Atención Hospitalaria y Atención Primaria. En esta última, Fuerteventura encabeza los datos de Canarias, y la escasez de especialistas a pesar de los intentos de la Gerencia del Hospital por contratar más profesionales. La falta de vivienda también sacude al colectivo. “Se consiguen médicos de fuera y, una semana o dos antes de incorporarse, llaman para decir que no porque no han encontrado una vivienda”, asegura.

-En mayo de 2025, tomó posesión el nuevo equipo del colegio de médicos de Las Palmas, liderado por Elizabeth Hernández. ¿Cuál es la línea que se marca desde el Colegio en esta nueva etapa?

-La Junta directiva anterior llevaba 15 años en el cargo. La línea que ha tomado Elizabeth se corresponde bastante con coger el testigo de la anterior junta. Hay cambios, pero muchos de los objetivos siguen siendo los mismos. Entre esos cambios está adaptarse a la realidad actual de la sanidad en Canarias, especialmente de la profesión médica. Hay cosas que ya estaba haciendo muy bien la anterior junta como la lucha contra las agresiones. También está el tema de la contratación de médicos, sobre todo de especialistas. Es algo que preocupa mucho por la falta de médicos y por las dificultades para traerlos y mantenerlos. Hay líneas de trabajo centradas en la lucha contra el intrusismo laboral y la defensa de los derechos de los médicos. Se trata no solo de proteger a la profesión médica sino el buen hacer con los pacientes.

-En el caso de Fuerteventura, ¿cuál es el objetivo principal que se han trazado desde el Colegio de Médicos de Las Palmas para esta nueva etapa?

-El principal objetivo está relacionado con la contratación de médicos. Trabajar con la Gerencia para intentar fomentar que se traigan y se mantengan médicos, sobre todo especialistas, en la Isla. Hay otros secundarios como mejorar el uso de la sede del Colegio, que se ha utilizado poco, y a la que se le puede sacar más jugo.

“En 2024 se notificaron 69 agresiones a médicos, el 19% en Fuerteventura”

-¿Qué radiografía hace de la sanidad en Fuerteventura?

-El diagnóstico principal es el de una sanidad, quizá, sobrecargada. No diría deficitaria, pero sí sobrecargada no solo en Atención Primaria, sino también en Atención Hospitalaria, pero también con muchos proyectos que se están llevando a cabo y con muchas oportunidades de mejora. Veo una mejoría en un futuro próximo. Lo principal es conseguir traer más especialistas a la Isla.

-¿Cuál es el principal problema que tienen los profesionales médicos en la Isla?

-Creo que el principal problema va acorde con la sobrecarga asistencial. El hecho de que la sanidad esté sobrecargada pone un peso excesivo en la parte asistencial y no deja que la profesión médica saque sus alas en otras vertientes como la formación, investigación, promoción y prevención de la salud. Cuando estamos ante una situación de sobrecarga como la de ahora, lo que prima es ver pacientes y sacar trabajo adelante. Lo ideal sería que el profesional tuviera espacio para poder hacer otras cosas.

-Y luego se tropiezan con el trabajo burocrático...

-Es una de las principales quejas que podemos tener los médicos, principalmente los que trabajan en Atención Primaria. Ahí, hay una carga burocrática enorme relacionada con las incapacidades temporales y con otra serie de papeleos. Se tienen en mente estrategias para intentar encauzar esa burocracia de forma más eficiente y en menos tiempo.

“Cerrar por completo la puerta a la sanidad privada no es el camino adecuado”

-Fuerteventura arrastra un déficit histórico de especialistas. Se han incorporado en los últimos años, pero siguen faltando. La Gerencia alega que no se consiguen traer, pero ¿por qué?

-La principal dificultad de la sanidad en Fuerteventura es la falta de especialistas. Creo que hay un problema social de fondo que es la vivienda. La búsqueda de un techo bajo el que vivir es una guerra constante. Desde la Gerencia se consigue que médicos de fuera se interesen por venir a la Isla. Una semana o dos antes de incorporarse, llaman para decir que no porque no han encontrado una vivienda. También hay problemas secundarios. El hecho de que haya mucho médico de fuera implica que, en un momento determinado, tengan que volver a su casa por responsabilidades familiares.

-¿Cree que faltan incentivos?

-Hay incentivos como el económico en comparación con las islas capitalinas. El hecho de que sea un hospital comarcal puede jugar en dos sentidos. Por una parte, podría ser menos atractivo para el desarrollo profesional, pero es verdad que la Gerencia actual está muy concienciada sobre el problema real que existe en la Isla y abre mucho la mano a la hora de aceptar proyectos, por lo que los médicos de fuera tienen la oportunidad de iniciar proyectos aquí.

-Al paciente que espera por un especialista durante meses no le convence escuchar que se están buscando médicos y no se encuentran...

-Entiendo la crispación que siente el paciente. La lista de espera es uno de los principales problemas que existen en Fuerteventura. En Atención Primaria es la isla que más lista de espera tiene en Canarias. Atraer personal especializado es algo que ha ido mejorando. En Atención Primaria, tanto en Puerto del Rosario como en Gran Tarajal, la mayoría son médicos especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria. Es algo que todavía no se ha conseguido en Corralejo y Morro Jable. Cada vez se crean más estrategias para traer esta medicina especializada. Entre otras, la formación de médicos especialistas en la unidad docente de Fuerteventura. En el Hospital, hay muchos servicios que son deficitarios en cuanto a personal especializado.

“El diagnóstico principal de la sanidad majorera es que está sobrecargada”

-Y cuando se consigue que venga el profesional ocurre que dura pocos meses...

-Muchas veces da la impresión de que el Hospital de Fuerteventura es de paso. Especialistas que vienen y están poco tiempo y luego se marchan. Los contratos ahora son largos y estables y prácticamente todo médico especialista que quiera trabajar se le contrata porque hay necesidad en muchos servicios. Creo que el problema de no conseguir mantenerlos surge más por la vivienda que de la propia profesión. Es cierto que la sobrecarga hace que el médico vea dificultades en su práctica laboral, pero no creo que la sobrecarga en Fuerteventura sea el motivo por el que los médicos se vayan fuera.

-¿Qué áreas tienen más problemas de especialistas?

-Digestivo y Rehabilitación. Digestivo es un servicio por el que pasan muchas pruebas como endoscopias, entre otras. No solo se hacen en pacientes enfermos, sino también en personas sanas a modo preventivo. Esa lista de espera se va acumulando. Hace tiempo que no se consigue atraer médicos de Digestivo a la Isla y eso conlleva ese problema. Ahora mismo, hay dos digestivos y, en ocasiones, tres. En Rehabilitación, el problema no es que no se haya conseguido traer a médicos. Ahora, ha habido contrataciones nuevas, pero lo que ha pasado en los meses previos es que se han ido médicas rehabilitadoras. En un servicio compuesto por dos o tres médicos la falta de uno de ellos supone un bajón del 30 por ciento. Ahora, hay dos médicas rehabilitadoras. Tanto el Negrín como el Hospital Insular, en ocasiones, sirven de apoyo. La situación de Rehabilitación está atacada por una lista de espera importante. No solo de consultas, sino también de pruebas. Son pacientes que, en muchos casos, requieren de un seguimiento largo. A veces, es difícil darles el alta por el tipo de patología que tienen y eso conlleva a que se vayan acumulando los pacientes en unas listas. Digestivo y Rehabilitación son los servicios que tienen una situación más dramática ahora mismo en el hospital.

“La escasez de especialistas también se debe a la falta de viviendas”

-¿Cómo están las listas de espera en Atención Primaria?

-El principal problema en Atención Primaria son las listas de espera. Si nos comparamos con otras islas de Canarias, Fuerteventura ha estado siempre a la cabeza en listas de espera en el último año. El motivo es múltiple y complejo, pero principalmente se debe a que los cupos que hay en Atención Primaria están por encima de lo deseado en número de pacientes. Todos los cupos, prácticamente, en Fuerteventura son excesivos y eso conlleva a que la gestión de la consulta sea muy complicada. Se puede pensar que la solución es crear cupos nuevos y distribuir mejor a los pacientes, pero para eso hacen falta también otro tipo de profesionales, como la enfermera familiar, y espacios. Uno de los problemas en Atención Primaria en la Isla es que se han quedado pequeños los centros de salud y consultorios.

-¿Cómo está la situación de los cupos?

-En Atención Primaria, lo ideal sería que los cupos fueran de un máximo de 1.100-1.200 pacientes y todos están por encima. El motivo es la falta de médicos. En el hospital hay estudios que nos hablan de cuántos digestivos, neumólogos u oncólogos  tiene que haber según la cantidad de población. En la gran mayoría de las especialidades, seguimos estando por debajo de lo deseable. Sigue haciendo falta contratar médicos especialistas, en general de todo.

-¿Qué le parece que la sanidad pública se apoye en la privada?

-En Fuerteventura, creo que la sanidad privada y la pública tienen una relación, quizá, algo menos visible que en otras islas donde existe más el hecho de concertar ciertas pruebas médicas y consultas a centros privados. El modelo de sanidad mixta es lo más práctico en una situación como la actual con sobrecarga del sistema público. En Fuerteventura, no se ha llevado más allá que en algunas pruebas médicas como una resonancia o en las que hacen falta máquinas de las que no hay en tanta cantidad en el hospital y así se libran las listas de espera. Es cierto que existen otros métodos antes de recurrir a la sanidad privada como las consultas extra, pero creo que el cerrar por completo la puerta a la sanidad privada no es el camino adecuado. Creo que hay cabida para ambos tipos de medicina en la sociedad actual.

“En la mayoría de las especialidades, seguimos estando por debajo de lo deseable”

-¿Hay constancia de intrusismo en la Isla?

-En Fuerteventura no conozco ningún caso actualmente. Es cierto que, ocasionalmente, aparece alguno. El Colegio de Médicos tiene como una de sus principales líneas de trabajo la defensa de la profesión médica. No solo el derecho del médico trabajador, sino también los del paciente en cuanto a seguridad y los beneficios que se espera de una atención médica. Todo lo que se ofrezca como atención médica sin serlo debe ser perseguido y presentado ante la justicia. Lo más habitual en Fuerteventura, al igual que en otras islas y zonas de España, es el intrusismo en el campo de la estética.

-El Servicio Canario de Salud contabilizó 544 agresiones en 2024, un 27 por ciento más que el año anterior. ¿A qué se debe este aumento?

-Es complejo encontrar el motivo de las agresiones. Creo que estamos ante una dinámica social en la que el respeto a cualquier profesional, sobre todo en el ámbito público, se está perdiendo. Hay una crispación social en el ámbito sanitario por los problemas de sobrecarga y listas de espera. En ningún caso, eso justifica una agresión. Desde la visión de los médicos hay una sensación general de poco carácter disuasorio de las condenas que se llevan a cabo a nivel judicial en las agresiones. Desde 2015 todas las agresiones a médicos, que se producen en el sistema público, son subsidiarias de considerarse delito de atentado. Eso es una ayuda para los médicos porque implica, en teoría, más protección, pero las penas que se dan no son del todo disuasorias.

-¿Le consta agresiones al personal sanitario de Fuerteventura?

-Sí. El Colegio de Médicos tiene datos de 2024. En la provincia de las Palmas se notificaron al Colegio de Médicos 69 agresiones de las que el 19 por ciento fueron en Fuerteventura. Cuando hablamos de 69 agresiones notificadas hablamos de la punta del iceberg. De este número, un 80 por ciento son verbales y un 17 por ciento físicas. Durante 2024 todas las agresiones físicas recogidas fueron a médicas mujeres. Una gran mayoría no se notifican, lo cual es una pena porque así no se puede luchar ni activar el protocolo del Colegio de Médicos. Hace unos años, se hizo una estimación a través de encuestas en la provincia de Las Palmas y se estimó que es de una al día.

-Está previsto que los médicos salgan a la calle en diciembre para reclamar un estatuto propio. Además, califican de “insulto” para el colectivo el estatuto marco que defiende el Ministerio de Sanidad. ¿Cuáles son las reclamaciones en Fuerteventura?

-Es una demanda a nivel nacional. Este estatuto propio es algo que lleva solicitándose desde hace muchos años. Hay que entender que la realidad de la profesión médica es muy diferente a la de otras profesiones dentro del sistema sanitario. El tipo de trabajo es distinto y es un colectivo minoritario si lo comparamos con otras profesiones como Enfermería, celadores o auxiliares. La distribución de tiempos también es diferente y cómo el sistema cuenta ese tiempo trabajado es lo que, en muchos casos, perjudica a los médicos en cuanto a cotización de horas y programación de una jubilación. Una de las principales luchas del Colegio de Médicos es la cotización de horas de guardia que hacemos. En estos momentos, hacemos guardias de 24 horas. A nivel de carga de trabajo y condiciones es algo que hace años que se está intentando quitar. Una de las reclamaciones es quitarlas y pasar a un sistema de turnos como existe en otras profesiones como Enfermería.