“Ahora toda persona que no tenga casa propia y pagada está en riesgo de ser desalojada”
Chus Vila, portavoz de la Plataforma Artículo 47 Fuerteventura
Ante el creciente malestar por las okupaciones de viviendas, Chus Vila, de la Plataforma Artículo 47 en Fuerteventura, sale al paso para desmentir rumores sobre esta práctica y alertar de la pasividad y falta de responsabilidad de las administraciones para solucionar el problema de la vivienda social en la Isla. Además, advierte de que la situación de la pandemia derivará en los próximos meses en un incremento sin precedentes de desahucios, porque personas con una situación económica normalizada “van a entrar a engrosar este número de cifras, que va a ser espectacular”.
-¿Qué efectos está trayendo la COVID en la vivienda en Fuerteventura?
-La cosa sigue muy lineal. Ha seguido habiendo desalojos, desahucios y okupaciones. Pensamos que en cuatro o seis meses se va a vivir algo que no tiene precedentes en este país ni en esta comunidad a nivel de desahucios, desalojos e impagos. No va a ser como la crisis de 2012, donde eran los hipotecados quienes sufrían, principalmente, los desalojos. Ahora toda persona que no tenga casa propia y ya pagada está en riesgo de ser desalojado en algún momento. Estamos temiéndonos que, en unos meses, todo el mundo va a dejar de poder pagar hipotecas o alquileres y esto va a suponer un endurecimiento gravísimo de la situación. Nos está dando mucho miedo el futuro.
-¿Ha aumentado el número de desahucios en alquileres en los últimos meses en la Isla?
-Se ha mantenido estable. No ha habido un aumento ni un descenso. Hubo una ley que dijo que no se podía echar a la gente, pero es mentira. La ley lo que dice es que no se puede echar si es por motivos directos relacionados con el coronavirus, como que la empresa [del arrendatario] ha hecho un Expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), pero no contemplan los demás motivos. No tiene en cuenta a esa gente que arrastraba una vulnerabilidad previa y que, a lo mejor, ya estaban sin trabajo cuando llegó el confinamiento y la pandemia. Estas personas tampoco pueden hacerse cargo de sus alquileres y no las tiene en cuenta la ley. No ha habido un aumento, pero lo habrá a consecuencia de esto y será enorme.
-¿La Plataforma maneja datos de cuántos desahucios ha podido haber en Fuerteventura?
-No. Conocemos a la gente que se pone en contacto con nosotras y nos explica su caso. Sabemos de casos directos, pero no tenemos datos oficiales.
-¿Cuál es el problema de la vivienda en Fuerteventura?
-El mismo problema que ha habido siempre. En todos estos años, ninguna institución pública ha puesto ningún medio para intentar solucionarlo. Hemos hablado con diferentes organismos de las administraciones, tanto locales como autonómicas, y seguimos viendo una impasibilidad absoluta hacia este tema. El problema que teníamos en 2012 no se ha corregido. Veníamos arrastrando de la última crisis la falta de viviendas de protección oficial, no hay protección de alquileres ni a las personas vulnerables se les ha dado protección habitacional. Son los mismos problemas que había hace seis o siete años, pero ahora agravados mucho más porque mucha de esta gente, que hasta ahora ha estado sobreviviendo o teniendo capacidad para poder mantener un nivel de vida óptimo, va a dejar de tener esa capacidad. Familias y personas económicamente normalizadas o sin estar en una situación de vulnerabilidad atrasada van a entrar a engrosar este número de cifras, que va a ser espectacular.
-¿Es una asignatura pendiente la apuesta por la vivienda social en Fuerteventura?
-La nota es cero. Se llenan la boca en hablar, pero se quedan en un proyecto que sacan de vez en cuando. Hay un proyecto del Gobierno de Canarias: Propuesta para pacto social y político por el derecho al acceso a una vivienda. Es de 2019. Cuando leímos la propuesta, nos pareció que era una adecuación de intenciones, pero que detrás había más de lo mismo. A los políticos, lo único que se les ocurre para solucionar el problema habitacional es construir viviendas de promoción pública y privada. No tienen más soluciones. Nuestra gran preocupación ha sido siempre decirles que ya hay suficientes y que sería mucho más rentable comprar que fabricar nuevas. Tenemos un parque inmobiliario enorme, pero muy deshabitado. Si los fondos buitre compran partidas inmobiliarias a los bancos a precio de saldo por qué no hacen eso las administraciones públicas. Tenemos el ejemplo de Sareb, el banco malo, creado con dinero público para rescatar los fondos de los bancos y que ahora está especulando lo más grande. Cuando se creó, su compromiso era hacer vivienda social. Sin embargo, no se ha hecho ni la primera.
-¿El ‘banco malo’ ha facilitado alquileres sociales en la Isla?
-Cero. El banco en Fuerteventura a lo único que se dedica es a que, si alguien ha okupado alguna de sus viviendas, lo denuncia judicialmente para intentar echarlo. Se ha portado exactamente igual que otras entidades bancarias. No hay que olvidar que este banco fue creado con dinero público para fomentar y crear vivienda social. El fin era ese, pero no ha funcionado.
“Se va a vivir algo sin precedentes a nivel de desahucios e impagos”
-¿Cuántas viviendas puede haber en la Isla en manos de los bancos?
-Ahora mismo el 30 por ciento puede estar en bancos. Me refiero a viviendas deshabitadas, vacías y en desuso.
-¿Y cuántas puede haber vacías en la Isla?
-Ahora mismo bastante menos. Las que están ahora necesitan obras para poder ser habitadas. Son esqueletos, estructuras con huecos de ventanas y de puertas. Las habitables son, prácticamente, cero. Es muy importante que esas viviendas sean reabsorbidas por las administraciones públicas, acondicionadas y puestas al servicio de la ciudadanía.
-La pasada legislatura, Podemos se posicionó en contra de los desahucios. Ahora que está en el gobierno de la Isla, ¿ha mostrado interés por facilitar el acceso a la vivienda?
-Ha habido interés, pero de boquilla, de apariencia. A la hora de la verdad, no ha habido una implicación real. En Fuerteventura, al margen de las siglas, la política la hacen todos igual. Unos pueden tener más facilidad para decir qué les preocupa, pero de ahí no pasan. De la preocupación a las soluciones hay un camino. Soluciones no ofrece nadie.
“La okupación se produce porque no hay respuesta de las instituciones públicas”
-¿Y cuáles serían esas soluciones para acceder a la vivienda?
-Antes que ninguna sería regular el mercado de la vivienda de alquiler. Una regulación no implica que se deje de ganar dinero. No se pueden subir a la moto y decir: “como no hay pisos voy a pedir 1.000 euros por uno”. Tiene que haber una tasación. La regularización solo la pueden hacer las administraciones y los partidos políticos. En segundo lugar habría que dotar a la ciudadanía de un parque de vivienda pública en régimen de alquiler social. Ahora nos vamos a encontrar con gente que sigue trabajando, pero el salario se ha precarizado tanto que no se puede optar a una vivienda en las condiciones en las que se están alquilando. La gente no tiene capacidad económica para alquilar a 500 o 600 euros cuando están ganando 1.000. Por último, es necesario poder absorber las viviendas abandonadas, rehabilitarlas y ofrecerlas como alquiler social.
-¿Por qué se produce el fenómeno de la okupación?
-La okupación se produce porque no hay respuesta de las instituciones públicas y no hay alternativas por parte de nadie. Entonces no queda otro remedio. Ni siquiera pueden vivir en la playa. No se puede poner una caseta y ponerse a vivir en cualquier sitio, porque te echan. No dejan ningún tipo de recurso alternativo. Al final, acabamos okupando viviendas que, pese a la información que circula por ahí de que siempre hemos okupado las que están vacías, son de entidades bancarias.
-¿Cuál es el perfil de la persona okupa en Fuerteventura?
-Okupan personas solas, familias, familias monoparentales, sobre todo la madre con uno o dos hijos, personas jóvenes… Hay de todas las edades, incluso, de más de 65 años okupando en Fuerteventura. La gente joven es la minoría. A veces, quien está solo se junta con otras personas para compartir okupación.
“Los okupas nos metemos en chabolas y casas que tenemos que rehabilitar”
-¿Cree que la ley apoya a los okupas, como aseguran algunos medios de comunicación?
-No, todo lo contrario. Las leyes se han endurecido, un poco más si cabe, frente a la okupación. Es verdad que el vox populi dice que los okupas entran en tu casa cuando te vas de vacaciones, pero eso no es okupación sino allanamiento de morada. No es lo mismo entrar a una casa cuando el propietario está de vacaciones y ponerse a vivir en ella, porque eso es un delito, que irme a una casa que está vacía y me pongo en ella a vivir. Eso es una falta. La okupación o la usurpación es una falta en el Código Penal. También interesa crear una conciencia de lo malos que son los okupas. Los okupas nos metemos en auténticas chabolas, casas destruidas que tenemos que rehabilitar para poder vivir dignamente.
-¿Qué okupación defiende la plataforma?
-Jamás se ha okupado una vivienda particular bajo ningún precepto. No vamos a hablar ya de una vivienda ocupada. Siempre se okupan viviendas vacías de entidades bancarias y, a ser posible, que lleven muchos años abandonadas. Nunca vamos a defender que se solucionen los problemas ocasionándoselos a otra persona. Eso no tiene sentido.
-Se habla de que, incluso, en Fuerteventura operan mafias encargadas de facilitar la okupación de viviendas. ¿Es realmente así?
-Eso se sabe desde hace muchos años. Creo que una de las grandes mafias que ha estado activa durante más tiempo en Fuerteventura estaba operando en El Matorral. Hay gente que se busca la vida y se lucra de las miserias ajenas en todas partes. La plataforma ayuda a las personas dándoles información. Hay gente que se dedica a abrir casas, pero siempre de bancos. Hay quienes se dedican una noche a abrir puertas y luego pasan esas nuevas cerraduras por 300 o 400 euros. Las mafias no son buenas, porque siempre que haya alguien que se esté lucrando con la miseria ajena es, como mínimo, reprobable.
“Las leyes se han endurecido, un poco más si cabe, frente a la okupación”
-¿Qué opina de que haya partidos políticos que estén fomentando medidas para agilizar la desokupación?
-Son personas que no tienen muy claro el problema. Hay muchos políticos que tienen un nivel de ignorancia importante. No saben de lo que están hablando. Ellos están pensando que si hay gente en tu casa hay que echarlos rápido. Si alguien entra en tu casa llamas a la policía y los desalojan sobre la marcha. No creo que haya necesidad de echarlos más rápido de una casa de un banco. Creo que todo esto está orquestado por los propios bancos, que quieren tener esa agilidad para desokupar. Al final, son los políticos haciendo el favor a los bancos y poniéndose del lado de las personas que ponen la pata encima a los vulnerables.
-¿De qué es consecuencia la okupación?
-Es consecuencia de la primera gran crisis del siglo XXI, que dejó a muchísima gente con sus maletas y sus muebles en la calle.
Comentarios
1 Anónimo Lun, 18/01/2021 - 09:40
2 Anonimo Lun, 18/01/2021 - 15:12
3 Canaria Lun, 18/01/2021 - 15:44
4 Juan Lun, 18/01/2021 - 22:52
5 Armando e nriqu... Mar, 19/01/2021 - 09:34
6 Mari Pepa Mar, 19/01/2021 - 09:55
7 Anónimo Mar, 19/01/2021 - 23:32
8 Erasmo y maria Mié, 20/01/2021 - 05:40
9 Erasmo y maria Mié, 20/01/2021 - 05:42
10 Decepcionada Mié, 31/08/2022 - 15:52
Añadir nuevo comentario