“Imagínese ocho edificios de 53 plantas, a tres metros por piso, con una cimentación de 4.000 metros cuadrados, repartidos por el paisaje rural de Puerto del Rosario, ubicados principalmente en la zona de El Time”. Así describe el proyecto del parque eólico Puerto del Rosario el presidente de la nueva asociación de vecinos El Time, Limpio y Sostenible, Rafael Martínez.

Critica que “a la magnitud de estos aerogeneradores se suma el hecho de que se trata del negocio privado de una multinacional, Naturgy Renovables, que con el dinero de todos, gracias a las subvenciones de la Unión Europea, y la entrega total del Gobierno de Canarias, que lo declara de interés general para no pasar filtros de evaluación ambiental, algo así como una vuelta a la Edad Media”, se suma un impacto próximo a las viviendas y en una zona de alto valor paisajístico.

“Eso sí, en nombre del progreso y las energías renovables que combaten el cambio climático”, añade el presidente de Agonane, Juan Cabrera. Esta asociación ecologista, que forma parte de la Federación Ben Magec, y el presidente de la recién fundada asociación de vecinos, han recurrido la autorización otorgada por el Gobierno para el parque eólico, de 29,2 megavatios.

Argumentan que, en este caso, se dan razones justificadas de “urgencia y “excepcional interés” para suspender el proyecto. Para los colectivos, los principales motivos para paralizarlo son la escasa distancia de los aerogeneradores a las viviendas, lo que a su juicio puede ocasionar “afecciones” a las personas, tanto por el ruido como por el efecto sobre la luz natural de las palas de los molinos, que generarían sombras.

“Sería como encender y apagar continuamente una luz” sobre unas viviendas, alguna de las cuales está a menos de 400 metros de distancia. “En horario nocturno, estos aerogeneradores por normativa, deben tener balizas, provistas de luces rojas parpadeantes a distintas alturas y con gran intensidad lumínica por la proximidad del aeropuerto, por lo que incluso de noche las molestias son continuas sobre las viviendas próximas, algo similar a tener un cartel de neón frente a tu ventana”, indica el presidente de la asociación de El Time, Limpio y Sostenible.

También destaca que los vecinos “en la trayectoria de la línea de evacuación de los ocho aerogeneradores proyectados, desde casi La Matilla pasando por El Time, Los Estancos y hasta llegar a la trasera de la gasolinera de Mercasosa, desconocen todavía las consecuencias de la expropiación de sus terrenos”, añade.

“Las afecciones o molestias paisajísticas son evidentes en Los Estancos, El Time y Tetir, en los alrededores de la montaña de Temejeregue y, para que no se quejen, los que vivan cerca del casco urbano de Puerto del Rosario, encima de la Cuesta Perico, les van a plantar otros dos aerogeneradores”, añade el portavoz vecinal. “Estas empresas no tienen como fin salvar el planeta o frenar el cambio climático, vienen hacer negocio y llevarse los beneficios”, concluye.