Mauro Acosta Armas dejó escrito un pregón, al que puso voz el locutor Santiago Travieso, que es historia documentada con fechas y referencias con nombre y apellidos, además de divertidas anécdotas señaladas siendo monaguillo, amigo de cuadrilla y aventuras, concejal y administrador, mano derecha de cada párroco, así como Hijo Predilecto del Municipio de Antigua, o recordando su recorrido y amistades hechas en su otro pueblo querido, la Villa de Arafo, señala el concejal de Festejos, Jonathan Peña.

El acalde, Matías Peña, recordaba el momento emocionante en que le anunciaba que iba a ser el siguiente pregonero de las Fiestas en Honor a Nuestra Señora de La Antigua. “El destino quiso que falleciera antes, pero esta noche en esta plaza, Mauro Acosta Armas está presente y desde aquí le aplaudimos por tanto y tanto que nos ha dejado en herencia a cada uno y a todo el pueblo”, señalaba en su bienvenida el regidor municipal.

Aún por la mañana el chascarrillo en cada café en el pueblo de Antigua era la emoción sentida en este pregón homenaje, añadiendo cada uno su anécdota o recuerdo compartido con Mauro Acosta.

“Las Fiestas de Antigua han dado comienzo de la mejor forma”, añade el alcalde, con repique tradicional de campanas, reuniendo en la plaza vecinos y vecinas, ofreciendo un brindis popular con papas, carne, arroz y además la música parrandera de El Campillo y Trasmallo.