El Cabildo de Fuerteventura, a través de la Consejería de Ordenación del Territorio, que dirige Sergio Lloret, somete a exposición pública la redacción de la futura Ordenanza Provisional Insular para la fijación de criterios que regulen el uso relativo a las acampadas y campings en Fuerteventura en suelo rústico.

De este modo, y con carácter previo a la redacción del documento, se recabará la opinión y propuestas de sujetos y organizaciones potencialmente afectadas a través del portal web del Cabido, en un periodo de dos meses a partir de la publicación del documento de consulta pública hoy, miércoles, 19 de agosto, en el Boletín Oficial de La Provincia de Las Palmas.   Asimismo, en la redacción de este documento se atenderá las propuestas y aportaciones de los ayuntamientos de la Isla.

Fuerteventura contará por primera vez con una regulación del fenómeno de las acampadas en todo el territorio insular, un documento que permitirá fijar los criterios de uso de acampadas y campings y evitar así el deterioro indiscriminado del territorio insular, que hasta ahora no ha sido definido o valorado debidamente. Con esta ordenanza se regulará la visita y la utilización de zonas concretas, de modo que se concilie con un uso sostenible.

Según Lloret, "el compromiso del Cabildo es dar una solución definitiva y seguridad jurídica a una demanda importante de la población majorera". "Por primera vez se regulará este fenómeno en todo el territorio insular, con un documento que abarque todas las aportaciones recibidas por parte de la ciudadanía y en base al cual tendrán que redactarse las ordenanzas municipales relativas a este aspecto".

La planificación tendrá en cuenta un conjunto de variables, como la demanda social, la capacidad de carga aceptable, características del suelo, cercanía a caminos y otros aspectos técnicos.

El fenómeno de las acampadas y campings en suelo rústico requiere de forma inmediata una ordenación legal, sistemática y rigurosa, que permita su protección y uso racional, además de incluir las medidas de prevención para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por el Covid-19.

Se trata de una ordenanza provisional, con el objetivo de tener antes de la próxima semana santa una regulación previa hasta la aprobación definitiva del Plan Insular de Ordenación de Fuerteventura.