El Cabildo de Fuerteventura, a través de su Consejería de Medio Ambiente, Lucha contra el Cambio Climático, Economía Circular e I+D+i, que dirige Marlene Figueroa, ha puesto en marcha un estudio estratégico para la definición de economía circular en la isla de Fuerteventura, en el marco de los compromisos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, y con el objetivo de diagnosticar y planificar las acciones a desarrollar en el corto, medio y largo plazo.

En los próximos meses, un panel de expertos y gestores expondrán sus diagnósticos sobre distintos aspectos de la economía, la sociedad y el medio ambiente de la isla majorera, analizados desde diferentes perspectivas, para tratar de establecer una transición desde la Economía Lineal (producir-consumir-tirar) hacia un modelo de producción sostenible y un consumo responsable y más eficiente, basado en reducir el consumo de materia primas, reciclar más y mejor, y reutilizar como nuevos productos o energía, y que se conoce como Economía Circular.

Así pues, desde la Consejería Insular se cree necesario realizar una política que apueste de verdad por la economía circular, una economía que se diferencie de la lineal de extracción, fabricación, utilización y eliminación, por otra llamada "circular", cuyo objetivo sea el de que el valor de los productos, los materiales y los recursos (agua, energía, etc.) se mantenga en la economía el mayor tiempo posible y se reduzca al mínimo la producción de residuos.

En este sentido, la consejera ha explicado que "hemos de tomar consciencia como sociedad insular de que formamos parte de un ecosistema frágil y muy sensible, en lo económico, en lo cultural y desde luego también en lo natural, y que si no lo cuidamos nosotros, nadie va a venir a hacerlo". Y añadió: "Tenemos que ver esta apuesta como una oportunidad para generar riqueza y bienestar para la Isla, pero de una forma sostenible, respetuosa e inteligente con nuestra tierra".

Asimismo, Figueroa ha señalado que la economía circular "pretende dar un paso más en la estrategia hacia la sostenibilidad de la Isla de Fuerteventura, en el marco de los compromisos de la Agenda 2030 de desarrollo sostenible. Y por supuesto vamos a trabajar a partir de lo ya logrado pero proyectando hacia el futuro, porque nuestros hijos y nietos tienen derecho a disfrutar también de la Isla, y nuestra generación, y los responsables públicos más, tenemos la obligación de hacer lo posible por cuidarla y conservarla".

Un sistema económico que generará nuevos empleos, empleos verdes, públicos y privados, cogido de la mano de una política de energías renovables, convirtiéndose en una garantía de futuro, una garantía de la utilización eficiente de nuestro medio.