-Después de cuatro años en el Cabildo, con un mandato muy turbulento, da el salto a encabezar la lista del PSOE por Fuerteventura al Parlamento. ¿Qué supone a nivel personal y político?

-En primer lugar, es un honor representar a mi partido en la Cámara de todos los canarios y, en segundo lugar, supone una enorme responsabilidad porque soy consciente no solo de la relevancia que tiene el PSOE en la sociedad canaria y majorera, sino que también supone representar a miles de majoreros y majoreras que depositan su voto en el Partido Socialista. Lo hago con una enorme responsabilidad y además orgulloso del equipo que me acompaña. A mí siempre me ha gustado destacar, en política, los equipos más que las individualidades y creo que me acompaña un grupo de hombres y mujeres honestas, honradas, preparadas y además que son fiel reflejo de la sociedad a la que aspiran representar.

-¿Con qué expectativas electorales se presenta a este 28-M?

-El PSOE, como no puede ser de otra manera, sale a ganar las elecciones. En Fuerteventura y en Canarias. Contamos con equipo y lo más importante, contamos con proyectos. Para la Isla, para los municipios y para la región. Cuando nos ha tocado gobernar hemos demostrado capacidad de gestión y, cuando hemos ejercido la oposición, como en el Cabildo los últimos dos años, hemos tenido una actitud firme, pero constructiva y propositiva y creemos que la ciudadanía lo va a recompensar. Creo que el PSOE encara estas elecciones con todos los mimbres necesarios para ser primera fuerza política en Fuerteventura y en Canarias. La herencia recibida de una Canarias gobernada por CC durante 30 años ha sido muy complicada de revertir, a la cola en indicadores económicos y sociales. El PSOE deja una Canarias en 2023 que lidera ratios en generación de riqueza, creación de empleo y redistribución de las rentas. Queda mucho por hacer, por eso es más importante que nunca que los socialistas gobiernen en Canarias y también en las instituciones de Fuerteventura.

-Uno de los problemas más acuciantes en islas turísticas como Fuerteventura es la falta de alquiler asequible. La vivienda para residentes, o no hay o se come buena parte de la renta de las familias. ¿Qué soluciones ve a esta situación, dramática en algunos casos?

-Hoy tenemos una Canarias más verde, más feminista y donde hay más justicia social que en 2019. Es cierto que está haciendo mella el tema de la vivienda, que es complejo y en esta última legislatura se han dado pasos como el Plan de Vivienda de Canarias, que es una hoja de ruta. Las medidas a medio y largo plazo, con la construcción de viviendas, hay que complementarlas con medidas a corto plazo, como ayudas al alquiler. En el PSOE concebimos la vivienda como un derecho mientras que la derecha nacional y nacionalista la concibe como un instrumento o recurso especulativo. Hay que estudiar la realidad del mercado, el parque de viviendas real, el efecto del alquiler vacacional y cómo se puede articular que en los municipios se pueda desatascar la construcción de vivienda residencial. Los socialistas trabajamos con evidencias y no con ocurrencias y este asunto, por lo que supone de exclusión social, va a ser uno de los grandes retos a partir del 28 de mayo.

-La Ley del Suelo parecía la panacea, pero no ha servido para aprobar ningún plan general ni de carácter insular en Fuerteventura en los últimos cuatro años, y el Gobierno de Canarias, con partidos que la criticaron, tampoco ha instado su modificación sustancial. ¿Es tan difícil poner las reglas del juego claras para que se sepa qué es lo que se puede y lo que no se puede hacer y que el modelo territorial esté perfectamente definido?

-Es una pregunta compleja. Efectivamente, cuando se aprueba la Ley del Suelo el Partido Socialista manifestó en el Parlamento que estaba lejos de suponer una solución a la problemática del planeamiento que existe en Canarias. Ya manifestó que no iba a ser la panacea, que no iba a solucionar los problemas de planeamiento existentes. A partir de ahí, tanto los ayuntamientos como el Cabildo de Fuerteventura, lo que han hecho es aplicar la norma. Es muy posible que en la próxima legislatura se abra la vía para estudiarla y valorar cómo mejorarla.

-¿Y qué filosofía acerca de la ordenación del territorio defendería, llegados a ese debate, el cabeza de lista del PSOE por Fuerteventura?

-El objetivo que tenemos en el Partido Socialista, en materia de planeamiento, es conjugar el binomio formado por la diversificación económica con la sostenibilidad medioambiental. No puede existir una sin que exista la otra. A partir de ahí, partimos de la base de que es necesario diversificar la economía insular, para crear empleo y dar salida laboral a los jóvenes majoreros y majoreras que están cada vez más cualificados y que quieren desarrollar su proyecto de vida en Fuerteventura. Esa aspiración debemos conjugarla con el respeto absoluto a la sostenibilidad de nuestro paisaje natural y nuestras riquezas medioambientales.

“El objetivo, en planeamiento, es conjugar diversificación y sostenibilidad”

-Una de sus principales tareas será canalizar las reivindicaciones insulares en materia de inversión para que se plasmen en los presupuestos de la comunidad autónoma. ¿Dónde estarán las prioridades?

-Si algo ha caracterizado estos cuatro años al Gobierno de Ángel Víctor Torres con respecto a Fuerteventura es que se ha pasado de presupuestar a ejecutar. CC se ha dedicado los últimos treinta años en Fuerteventura a llenarse la boca de lo que se presupuestaba para la Isla, pero se olvidaba de ejecutar. En la última legislatura se ha cumplido y a las pruebas me remito: se ha abierto un nuevo tramo de la autovía entre Caldereta y el aeropuerto, y las obras estarán culminadas probablemente en 2024. Se ha desbloqueado, después de más de dos décadas, el proyecto entre el aeropuerto y Pozo Negro, gracias a la gestión del PSOE, con financiación garantizada. El eje insular de carreteras camina a muy buen ritmo. Se ha desbloqueado la concesión del puerto de Morro Jable, se ha presentado el proyecto del muelle de Gran Tarajal y se ha aumentado la capacidad de atraque en el puerto de Corralejo. Sin olvidar que el Gobierno canario ha invertido 10 millones de euros en Zurita para automatizar la planta de tratamiento de residuos. En materia sanitaria se ha vivido un avance sin precedentes, culminando la ampliación del Hospital y la instalación del primer búnker de radioterapia oncológica en una isla no capitalina, y se ha creado una nueva unidad de estancia media para pacientes de salud mental, entre otras medidas.

-Sobre el puerto de Corralejo, la ampliación del muelle ha generado protestas y miles de firmas en contra. ¿La propuesta está cerrada o se puede valorar qué hacer? ¿Es sensible con esa reivindicación social?

-El PSOE no va a recibir lecciones de otros partidos políticos con respecto a la defensa del medio ambiente. Somos conscientes de la importancia que tiene nuestro medio natural en nuestra forma de vida y no vamos a adoptar ninguna medida que pueda ser lesiva contra esos intereses. Dicho esto, el muelle de Corralejo es el puerto, junto con el de Playa Blanca, de mayor tráfico de pasajeros de las Islas, y supone además un polo de generación de riqueza. Supone la continuación del eje oriental y es una infraestructura tractora de economía. Por tanto, partiendo de ese razonamiento, entendemos que es necesaria. Se tendrán en cuenta esas reivindicaciones de una parte de la población del norte y cualquier ampliación se hará con las máximas garantías ambientales.