Qué duda cabe que el uso del bitcoin en Europa ha dado un paso de gigante en las últimas décadas. De ser algo prácticamente desconocido, a poco a poco irse implementando sin problema en la sociedad. El uso de las criptomonedas se ha extendido por todo el viejo continente, aunque de forma desigual.

Su adopción no ha sido homogénea entre todos los países. Los hay que destacan en cuanto a propiedad de criptoactivos, su uso en diferentes sectores, cantidad de transacciones y un volumen de operaciones que no deja de crecer.

Y aunque hay otros que siguen dándole un poco la espalda o, al menos, se muestran más reticentes, lo cierto es que Europa está cada vez más inmersa en un universo cripto repleto de oportunidades.

Como si de una moneda al uso se tratara, el precio bitcoin euro también ha fluctuado en los últimos años. Pero su regularidad y persistencia, han hecho de él un valor seguro en momentos de incertidumbre, una reserva de valor y ¿por qué no? En una nueva forma de inversión a tener en cuenta.

Tanto empresas como ciudadanos han incorporado al bitcoin en todo el mundo, bien para sus finanzas personales o corporativas, pero ¿en qué países destaca más esta “nueva” moneda?

El éxito del bitcoin varía la adopción según el país

La adopción de bitcoin varía significativamente de un país a otro. Y es que, según recientes estudios sobre la adopción del bitcoin en Europa, países como Reino Unido, Alemania, Francia, Suiza o Liechtenstein, se sitúan en la vanguardia del uso de criptomonedas.

En España, por su lado, ha avanzado considerablemente en los últimos años. No es de los países que más utiliza bitcoins, ni compra estas monedas virtuales pero ha avanzado considerablemente. De hecho, se estima que cerca del 5% de una población de casi 50 millones de habitantes, tiene ya criptoactivos.

España se sitúa en una posición bastante prometedora dentro de Europa respecto a la penetración de los criptoactivos llegando a superar a otros países del continente como Italia y los Países Bajos.

Si viajamos a países del este como Polonia, Estonia, Letonia o Lituania los porcentajes resultan bastante menores. De ahí que el nivel de adopción depende de factores como la demografía, la regulación, la estructura del sistema financiero y la educación financiera de la población.

Volumen de operaciones en crecimiento

La intensidad en el uso del bitcoin también se observa en el volumen de operaciones. En Europa entre julio de 2023 y junio de 2025 ha habido un alto volumen de transacciones, con picos en la actividad históricos y nunca antes vistos tanto entre inversores particulares como institucionales con resultados nada despreciables.

Por movimientos entre los diferentes mercados sobresalen: Alemania es uno de  los países más destacados en volumen de operaciones y servicios de custodia. Por su lado durante el periodo anteriormente especificado, Suiza o Liechtenstein destacan en número de transacciones gracias a un entorno regulatorio muy favorable para el bitcoin.

El aumento del volumen no sólo refleja el interés privado, también es un proceso de profesionalización en que participan empresas financieras tecnológicas, plataformas de inversión y entidades.

Perfil de los usuarios y tendencias demográficas

En la mayoría de países europeos, el perfil de los propietarios de criptodivisas demuestra cierto grado de educación financiera, una buena formación y un alto nivel profesional. La mayor parte de esta población joven o de mediana edad, también tiene cierta propensión al riesgo.

En España, por ejemplo, son hombres jóvenes con cierto nivel de estudios y cultura financiera los que más poseen criptoactivos.

Por lo general, en el viejo continente, son los jóvenes adultos y de género masculino quienes son más propensos a invertir en criptomonedas que las generaciones más mayores.

Además, con las inversiones  en bitcoin muchos usuarios se plantean una visión a largo plazo, considerando la criptomoneda como un activo de reserva más que una  apuesta especulativa.